Gustavo Piñero, integrante del cuerpo técnico de Diego Maradona para el Mundial Sudáfrica 2010, compartió dos anécdotas significativas que involucran a su hija y la figura de Diego, destacando el lado humano y cariñoso del ídolo argentino que hoy cumpliría 65 años.
Por ese motivo, el entrenador de arqueros se hizo presente en los estudios del streaming de 0221.com.ar, donde en el programa No juegan con nadie, recordó muchas historias vividas con Maradona, que incluso van más allá de lo que pase en un campo de juego o vestuario.
El episodio más detallado se relaciona con la llamada en la que Diego confirmándole que iba a ser entrenador de arqueros para el Mundial, momento en el cual le pidió a su hija el teléfono para hacer una llamada, ya que en ese momento se quedaban sin saldo fácilmente.
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Gustavo Piñero en su visita a No juegan con nadie.
Nicolás Guillones
Piñero se sorprendió porque no le había contado a nadie (salvó a su esposa) sobre la posibilidad de ir al Mundial, por lo que su hija lo miraba extrañada. Cuando habló con Diego y cortó la llamada, su hija le preguntó: "¿Quién te llamó, papá?", a lo que él respondió: "Maradona". Ella le dijo: "¿Me está cargando?", ya que le había anunciado que sería el entrenador de arqueros de la Selección argentina en el Mundial.
El costado más humano de Diego Maradona
Piñero también compartió un recuerdo de la preocupación personal de Maradona por la salud de su hija que había empezado a sufrir "migrañas bravas" y estuvo internada por un par de días. Al poco tiempo de que se uniera al equipo, Maradona lo llamó de noche, lo que sorprendió ya que era muy pronto en su relación para que Diego se preocupara constantemente.
No juegan con Nadie Navidad Maradoniana Piñero
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En la llamada, Maradona le preguntó directamente: "Hola, Gusti, ¿cómo estás? ¿Está bien? ¿Está internada? ¿Necesitas algo?".• Cuando su hija fue dada de alta, Piñero la llevó al entrenamiento. Diego preguntó por ella y, al saber que estaba en la oficina del analista de video, le pidió al utilero Marito que preparara el mate.
Maradona fue a buscarla, abrió la puerta y se presentó ante ella: "Hola, flaca, soy Diego". Piñero destacó que su hija sigue contando esa anécdota hasta el día de hoy, resaltando el auténtico y personal trato de Diego.