Mientras Gimnasia celebraba la victoria 1 a 0 sobre Estudiantes, producto del grito de gol anotado por José Perdomo, el sismógrafo del Observatorio de La Plata, situado a solo 600 metros del estadio de 1 y 57, captó una vibración inusual. Se trató de un sismo artificial de 0,3 grados, causado por el festejo unísono de miles de hinchas de Lobo.
Todo ocurrió a los 9 minutos del segundo tiempo. Luego de que el árbitro Juan Bava cobrara una falta a unos 35 metros del arco defendido por Marcelo Yorno, Perdomo tomó la pelota de manos de Carlos Javier Odriozola y ejecutó el disparo que terminó en gol. La euforia en la popular albiazul, ubicada frente al colegio Albert Thomas, fue tan grande que generó una vibración notable.
Pasados los años, esto se puso en duda y comenzó a tomar la forma de mito platense y futbolero. Aunque no fue un sismo natural, el fenómeno marcó un hito para la historia del elenco Tripero y la ciudad. Ahora, la ciencia no solo explica cómo se produjo ese temblor que aún vive en la memoria popular, sino que lo certifica.
Explicación sismo gol Perdomo
Esto tiene que ver con que, 0221.com.ar accedió de manera exclusiva al registro del Departamento de Sismología de la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), el cual certifica la veracidad de los hechos. Como se explica, fechado en el día 5 de abril de 1992 con el horario de inicio del registro a las 11.06, se muestra como se iniciaron las detecciones del sismógrafo con el comienzo del partido.
Se detecta que luego del inicio del segundo tiempo, la marca registra el gol de Perdomo cuya magnitud calculada es de 0,3 en la escala de Richter. Además, se destaca que el evento tiene un ancho de 2 horas que fue lo que duró ese clásico platense.
El registro del sismógrafo de La Plata
Registro sismo gol Perdomo Gimnasia
El resultado quedó en los libros, pero fue el temblor provocado por el gol de Perdomo el que convirtió esa tarde en un hito inolvidable para el pueblo tripero y un caso singular donde el fútbol y la ciencia se cruzaron en la ciudad.