La escena del hallazgo, la conducta del hombre demorado y la evaluación de los investigadores elevan la sospecha de un ataque violento en City Bell.
La investigación por la muerte de la Virginia Franco, la psiquiatra de 65 años encontrada sin vida dentro de su casa de Cantilo entre 15 A y 17, en City Bell, comenzó a dar un giro decisivo en las últimas horas.
De acuerdo a lo que pudo saber 0221.com.ar, la autopsia determinó que la profesional murió como consecuencia de un shock hipovolémico, un cuadro compatible con una pérdida masiva de sangre. El resultado forense, sumado a las características de la vivienda y a las primeras declaraciones de testigos, empuja a los investigadores a profundizar la hipótesis de un homicidio en ocasión de robo, ya que se certificó el faltante de pertenencias.
La Policía bonaerense encontró al motochorro en el barrio San Carlos de La Plata y pudo capturarlo luego de una tensa secuencia. El joven tiene 20 años.
La víctima tenía 22 años y fue atacada en las calles de Tolosa tras una discusión entre conocidos del barrio. El agresor escapó y es intensamente buscado.
Fuentes del caso confirmaron que al ingresar a la propiedad los peritos encontraron la casa totalmente revuelta, con manchas de sangre en varios ambientes y puertas forzadas. El escenario, por su violencia y desorden, ya había generado dudas desde el inicio; sin embargo, la confirmación médica terminó de consolidar la sospecha de que la muerte no habría sido natural ni accidental.
"Todavía no lo caratuló como 'homicidio', sigue siendo 'averiguación causales de muerte', pero creería que lo recaratulará en breve", explicó una fuente clave de la pesquisa a este medio, aludiendo al fiscal Álvaro Garganta, de la UFI N° 11, quien tiene la causa bajo su dirección.
Uno de los últimos posteos en redes sociales de la psiquiatra encontrada muerta en su vivienda de City Bell
Aunque por el momento no hay detenidos, sí fue demorado un hombre que sería amigo de la víctima y quien realizó el llamado al 911 tras hallar el cuerpo. Según pudo saber este portal, se trata de una persona con acceso habitual a la vida cotidiana de Franco: tenía la confianza suficiente como para manejar algunas de sus cuentas bancarias, un dato que los investigadores no pasaron por alto.
A esa información se suma algo que llamó especialmente la atención de los policías que trabajaron en el lugar: durante todo el procedimiento, el hombre mantuvo un silencio absoluto, sin aportar datos relevantes ni mostrarse colaborativo. Su teléfono celular fue secuestrado y permanece bajo análisis.
Franco era una psiquiatra muy respetada en la ciudad. Atendía en su consultorio de calle 55 entre 10 y 11 y era descripta por vecinos y pacientes como una mujer reservada, amable y profundamente dedicada a su trabajo.
Virginia Franco tenía 65 años. Su muerte, al parecer, fue traumática y todo apunta a un crimen
Su muerte, rodeada de violencia, conmocionó a City Bell y dejó múltiples interrogantes abiertos. El shock hipovolémico confirmado por la autopsia no solo marca la causa médica del fallecimiento: también redefine por completo la orientación de la causa.
Mientras los peritos terminan de analizar rastros, teléfonos y movimientos bancarios, la fiscalía trabaja "con mucha cautela", según remarcaron las fuentes consultadas. Pero la hipótesis de un homicidio gana terreno con cada nueva evidencia.
La investigación continúa y se esperan novedades formales en las próximas horas sobre la posible recaratulación del expediente y la situación procesal del hombre demorado.