Un proyecto de ordenanza que ratifica los convenios firmados por el Municipio con la empresa Aguas Bonaerenses (ABSA) para realizar el cambio de cañerías en la ciudad generó debate y polémica en la sesión ordinaria del Concejo Deliberante de La Plata de este martes. El punto que generó controversia fue la excepción de la tasa de Control de Calidad de la obra pública propuesta por el Ejecutivo, lo que generó el rechazo de la bancada del PRO.
El expediente ratifica los convenios de cooperación mutua suscriptos entre el intendente Julio Alak y ABSA los días 2 de mayo y 10 de septiembre por 281 millones y 387 millones, respectivamente, para el recambio de 4.120 metros cañerías en la ciudad y también llevar adelante obras en los barrios de Los Hornos, Villa Elvira, San Carlos y La Granja.
La controversia surgió por el artículo 2° del proyecto elevado por el Ejecutivo que establece la exención del pago de la tasa por Control de Calidad de Obra en la Vía Pública a la empresa ABSA, así como también a las empresas ejecutoras para las obras descriptas en los convenios suscriptos.
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Marcelo Galland presidió la sesióon ordinaria N°16 del Concejo Deliberante.
Los argumentos de los distintos bloques
El bloque del PRO criticó duramente al Municipio por esta medida y votó en contra. El resto de los bloques opositores, el PRO - Libertad, Buenos Aires Libre y UCR + PRO, votaron junto con el peronismo, aunque plantearon críticas por el servicio que brinda la empresa estatal en la ciudad.
La edil del PRO, Lucía Barbier, habló en nombre del bloque y le recriminó al Ejecutivo que no le haya dado ninguna excepción a los platenses y sí le perdone tasas a ABSA ya que, acotó, "es una empresa que debería ser modelo y sin embargo es muy deficiente". Consideró también que esta medida sienta un precedente para que otras empresas también pidan ser exceptuadas.
El titular del bloque libertario, Guillermo Bardón, criticó al PRO por oponerse a la ordenanza. "Nos parece que oponerse a una inversión que tiene que ver con llevarle un servicio a los platenses no es muy coherente", señaló y defendió el voto a favor para que se hagan las obras. "Lo que sí reclamamos es transparencia", aclaró.
Por el oficialismo, el concejal Juan Granillo Fernández aclaró que la ordenanza ratifica las intervenciones que hará ABSA "que vienen a solucionar parte de los problemas en la ciudad que son las perdidas por la antigüedad que tienen las cañerías" y precisó que la exención de tasas "representa 20 pesos por habitante de la ciudad".
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El Concejo debatió este jueves sobre ABSA, el veto universitario y el escrache a los liberales.
Veto universitario y escrache a libertarios
El debate se extendió en el recinto con otros dos proyectos que se terminaron tratando en conjunto: la preocupación del cuerpo por la ratificación del veto del presidente Javier Milei a la ley de Financiamiento Universitario impulsado por Unión por la Patria, y el repudio al escrache sufrido por el subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, la semana pasada cuando se disponía a brindar una charla en el edificio Sergio Karakachoff, presentado por el bloque libertario.
Ambos expedientes fueron votados de manera nominal, como suele ocurrir con los temas "espinosos" en el deliberativo platense. El primero fue desaprobado por 14 votos a 8 debido a que no se consiguieron los dos tercios necesarios por tratarse sobre tablas. El PRO, los libertarios y el bullrichismo rechazaron el proyecto del oficialismo sobre el veto presidencial al financiamiento universitario, mientras que el peronismo y los radicales votaron afirmativamente en la misma línea en que lo hicieron los diputados nacionales tanto de UxP como de la UCR en el Congreso.
En el segundo caso, el repudio al escrache sufrido por Álvarez y los legisladores Agustín Romo y Santiago Santurio se aprobó con 15 votos a favor, 4 en contra y 3 abstenciones. La UCR, el PRO y LLA votaron a favor. El oficialismo, en tanto, votó dividido: tres concejales votaron a favor (Marcelo Galland, Juan Granillo Fernández y Micaela Maggio); dos se abstuvieron (Julio Cuenca y Pablo Elías), mientras que los cuatro restantes (Cintia Mansilla, Crisian Vander, Ona Parrilli y Gisela Didío) rechazaron de plano el proyecto. La edil Yanina Sánchez estaba ausente al momento del debate.
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La concejala Mansilla consideró "una hipocresía" aprobar el repudio a los hechos de violencia contra los libertarios y no rechazar el veto a la Ley de Financiamiento Universitario, mientras que el presidente del bloque del PRO, Juan Martínez Garmendia, le respondió que el peronismo es "hipócrita" porque "en los últimos cuatro años no hizo nada por la educación pública".
El concejal retomó la postura que fijó en el Congreso Nacional el diputado nacional Cristian Ritondo. "Nadie está en contra de la universidad pública, gratuita y de calidad", señaló y pidió "salir de las discusiones populistas y no tirar piedras".
Por el radicalismo, el concejal Javier Mor Roig defendió el proyecto de ley que incrementaba el presupuesto universitario en el Congreso y que fue vetado. No obstante, llamó a "no quedarse en el debate salarial sino sentarse a debatir la educación superior en el siglo XXI". Sobre el escrache a Álvarez sostuvo que, "aunque seguro no iba a coincidir en casi nada" con el funcionario nacional de LLA, "tiene su derecho a opinar y expresar sus ideas".