Marcos, el papá de Kim Gómez, habló en la puerta de la casa velatoria de La Plata y contó que el padre de uno de los acusados lo llamó para pedir perdón.
Marcos Gómez, el papá de Kim Gómez, despidió a su hija de 7 años en una casa velatoria de La Plata. Antes de partir rumbo al cementerio para el último adiós, contó ante los medios que el padre de uno de los acusados de asesinarla lo llamó para pedirle disculpas y este lo invitó al entierro.
Luego de hablar sobre como pasó la noche y el dolor que está atravesando la familia tras la enorme y traumática pérdida, el padre de Kim aprovechó para contar que el papá del mayor de los delincuentes lo había llamado por la mañana para pedirle disculpas.
El presidente del bloque del PRO en la Cámara de Diputados, Matías Ranzini, exigió que el ministro de explicaciones tras la muerte de Kim Gómez.
Intentó explicar que el problema de la inseguridad tiene múltiples factores y que la gestión de Axel Kicillof es la que menos homicidios dolosos tiene.
"Hoy me llamó el papá de uno de los chicos, me llamó Héctor. Me llamó me quiso pedir disculpas, la verdad que le quiero dar la oportunidad. Pero te quiero dar la oportunidad para que vengas, que vengas y que me enfrentes. Quiero que me mires a la cara y ver si sos sincero con lo que me dijiste hoy", dijo y agregó: "Te voy a dar la oportunidad, pero tené coraje. Tené coraje para enfrentarme. Tené coraje loco: tu hijo me la mató. Tu hijo me la mató. entonces tené coraje y vení a enfrentarme. Enfrentá mi dolor. Quiero que vengas, que des la cara", agregó, mirando a la cámara constantemente.
Además, lo invitó a asistir al entierro de su hija: "Ahora nos vamos al cementerio. Quiero que vayas loco a despedir a mi hija. ¿Sabés que le gusta? Le gustan los capibaras, llevale un capibara. Mi hija se lo merece", cerró. La familia de Kim prosiguió la dolorosa ceremonia rumbo al cementerio local detrás del coche fúnebre.
En medio de la conmoción el último miércoles. Héctor, decidió enfrentar las cámaras para trazar un crudo relato sobre su hijo. Dijo que "está perdido por la droga", pidió que "pague" en la Justicia y pidió perdón a la familia afectada.
Contó además cómo fue la decisión de entregarlo a lo policía cuando se enteró de lo que había ocurrido. "Había ido a comprar unas cubiertas a Buenos Aires, estaba volviendo y me llamó mi hija. Me dijo 'papi, Tobías se robó un auto y mató a una nena'. Le dije que lo retenga para que lo entregáramos", sostuvo y comentó: "Yo venía renegando mucho con él, hacía 20 días se había robado un auto, estaba en la comisaría Quinta y yo no lo quería retirar, quería que lo manden a algún lado. Pero me dijeron que no lo podían tener porque es menor, lo tenía que retirar sí o sí".
Conmovido por la brutalidad del hecho, el hombre se refirió a su hijo como "una mierda de persona" y sostuvo: "Así como lo entregué, ya le dije que no me llame, que se pudra adentro de la cárcel y que pague lo que hizo. Tenemos mucha bronca, me cansé de hablarle, le había dejado una casa, una moto, no tenía necesidad de hacer nada de esto”.
En medio del dolor de la familia Gómez, Héctor le dejó un mensaje a los padres de Kim: "Les pido mil disculpas y los acompaño en el sentimiento. Él va a pagar lo que hizo, no va a salir de ahí adentro", dijo. Y contó sobre su encuentro fallido con Marcos, el padre de la nena de 7 años asesinada: “Cuando vi que estaba dando la nota, fui al Cementerio a encontrarme con el padre de Kim para pedirle disculpas. Cuando llegué, él ya no estaba. Fui a la comisaría para pedir el domicilio, pero no me lo quisieron dar”.
En cuanto a los problemas de adicción de su hijo, explicó que “habrá empezado a consumir hace dos o tres años atrás. Dejó el colegio, no quiso volver a empezarlo y hubo muchos problemas en el medio. Estaba rebelde”. Mientras que por último insistió en la necesidad de "que no los suelten a ninguno de los dos" y "que paguen lo que tienen que pagar”.