Familiares, sobrevivientes, militantes e integrantes de organismos de Derechos Humanos reaccionaron con dureza al escucha la condena a prisión perpetua contra los represores Miguel Etchecolatz y Julio César Garachico. Concretamente rechazaron la posibilidad dada por el tribunal a este último de cumplir la pena en su domicilio y la negativa a encuadrar los delitos en el marco de un genocidio. Inmediatamente los presentes se pusieron de pie y empezaron a gritar su indignación, lo cual llevó al presidente del Tribunal a ordenar el desalojo y el cierre de las puertas de la sala de audiencia.
El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata condenó a Etchecolatz, quien ya purga otras 8 perpetuas, y al expolicía Julio César Garachico por los secuestros y torturas de 7 personas en el excentro clandestino de Pozo Arana, entre ellas el albañil Jorge Julio López, y los asesinatos de 4 de esas víctimas, entre las cuales está Francisco López Muntaner, uno de los estudiantes secuestrados en el episodio conocido como La Noche de los Lápices.
"Se condena a Miguel Osvaldo Etchecolatz a la pena de prisión perpetua como coautor del homicidio calificado por alevosía, por el concurso premeditado de dos o más personas en perjuicio de Norberto Rodas y Alejandro Sánchez", expresó el presidente del Tribunal, Andrés Basso, al leer esta tarde el veredicto para el multicondenado Miguel Etchecolatz.
También condenó a Garachico, aunque en su caso el cumplimiento de la pena será domiciliaria, lo cual generó una dura reacción de los presentes durante la lectura de la sentencia que motivó que el presidente del tribunal ordenara cerrar las puertas.
Se trata de una causa que se basa en el testimonio de Jorge Julio López en el juicio realizado en 2006, poco antes de su segunda desaparición, en el marco de las audiencias que terminaron con la primera condena al genocida Etchecolatz.
"Cárcel común, perpetua y efectiva" comenzaron a gritar los presentes, entre quienes estaba Rubén López, uno de los hijos del albañil Jorge Julio López, y Emilio López Muntaner, hermano del estudiante "Panchito" López Muntaner, secuestrado en el episodio conocido como La Noche de los Lápices, ambos víctimas en este juicio.
El presidente del Tribunal no pudo continuar con la lectura ante los gritos de "justicia, basura, vos sos la dictadura; justicia, basura, vos sos la dictadura", mientras el público se retiraba y continuaban gritando en el pasillo, ante lo cual el juez ordenó el cierre de la sala y continuó leyendo el veredicto solo para las partes
El malestar de familiares de desaparecidos, sobrevivientes y representantes de los organismos de derechos humanos que estuvieron presentes en el recinto de audiencias se centra, además de la domiciliaria a Garachico, en que el fallo no se encuadró en un contexto de genocidio.
En cambio, el tribunal sí pidió que se señale como "centro clandestino de detención" al lugar donde funcionó La Armonía, donde actualmente está el Regimiento 7, y envíe copias de las actas del juicio a la facultad de Artes y al Bachillerato, donde estudiaron los desaparecidos Francisco López Muntaner y Patricia Dell Orto.
