"La Fiesta Judía Volumen I" generó gran expectativa en la ciudad. Decenas de personas se agolparon en la entrada de la Sala Ópera del Teatro Bar, en 58 entre 10 y 11; donde los miembros del Max Nordau los esperaban con un sinfín de propuestas para vivir una experiencia sin precedentes en la ciudad.
Con knishes de papa, pletzalej y leicaj para degustar y una estupenda música klezmer para gastar la suela de los zapatos, la primera dedición de la innovadora fiesta fue un éxito rotundo y sus organizadores no descartan volver a reeditarla próximamente.
Lo cierto que quienes participaron del evento pudieron disfrutar un poco de las comidas, las bebidas, la música y las tradiciones del pueblo judío, que abrió sus puertas para recibirlos y compartir un poco de su rica cultura con ellos. Tal fue la propuesta de los integrantes del Centro Israelita que se propone generar puntos de encuentro entre la comunidad judía y quienes forman parte de ella o no, pero están interesados en conocerla.
El Centro Literario y Biblioteca, desarrolla un judaísmo laico, "respetando las diversidad de credos e ideologías y promulgando la participación institucional independientemente de las creencias de cada persona". A partir de diferentes actividades recreativas, buscan "generar áreas plurales que permitan el entendimiento y la lucha contra la discriminación, en pos de una sociedad más igualitaria".
En ese marco fue que nació la propuesta de "La Fiesta Judía", un evento abierto a todo público y que se llevó a cabo con una entrada a tan solo 100 pesos.