Paulo César Ferreira nació en el vecino país y se crió siendo un joven nada aplicado. Entre los 15 y los 19 decidió dejar la ciudad y se volcó a la vida de campo. Fue entonces cuando dio sus primeros pasos como hombre de fe, se volvió evangelista y ya nunca dejó de serlo.
En aquellos años conoció a una joven misionera, oriunda de Berisso. Se enamoró, se casó y emigró a la región, donde se instaló en los alrededores de la parroquia El Quincho. Todavía lejos de la política, comenzó un destacado trabajo barrial y solidario, ganándose la confianza de los vecinos y viéndose enfrentado, más de una vez, con las autoridades del Ejecutivo local a cargo del intendente Jorge Nedela en cuestiones relacionadas a los asentamientos informales, ocupación de tierras, desalojos y planes de vivienda.
En febrero de 2016, sin embargo, Ferreira dio el salto al mundo de la política. Convocado por el mandatario municipal, se sumó como coordinador del área de Tierra y Vivienda de la Comuna.
Aunque fue presentado como un funcionario extrapartidario, Paulinho se convirtió en un engranaje clave para la gestión al contener temas de gran sensibilidad e interés entre los sectores más vulnerables de la localidad. Es que en sus manos se encuentran, entre otras decisiones, la potestad de definir quiénes serán beneficiados con terrenos y viviendas en diferentes zonas de la ciudad, lo que ha sido denunciado por vecinos y referentes políticos de la ciudad por presuntas irregularidades.
Este lunes, el pastor formalizó su llegada a la política y junto al propio Nedela presentó en sociedad su propio espacio político, inaugurando el primer local partidario del “Movimiento Vecinalista Barrios Unidos” en 9 entre 149 y 149 Norte. “Somos un grupo de vecinos que desde su barrio, casa, iglesia, lugar de trabajo o estudio, trata día a día de colaborar para que las propuestas se traduzcan en hechos concretos de la vida comunitaria”, remarcaron durante el lanzamiento.
Lo cierto es que, a poco menos de un año de las próximas elecciones, Ferreira cumplirá un rol más que importante para Cambiemos: tratar de captar el voto de los sectores más humildes y postergados, quienes le fueron esquivos a la coalición comandada por el presidente Mauricio Macri y, a su vez, son los más golpeados por la creciente inflación, la desocupación y la devaluación que componen la dura crisis económica que atraviesa el país.