Un nuevo pedido de aumento de los taxistas reavivó la interna gremial entre sindicatos y asociaciones que representan al sector. Es que el titular de la Asociación Taxistas, Peones y Choferes de La Plata, Marcelo Arévalo, presentó un pedido al Concejo Deliberante para aumentar la bajada de bandera de 24 a 30 pesos, y la ficha de 3 a 3,50.
"Fundamentamos nuestro pedido debido a la situación que estamos atravesando por el aumento no sólo del combustible sino también de los seguros, mantenimientos, cargas previsionales e impuestos municipales", detallaron en el escrito dirigido al presidente del cuerpo legislativo Fernando Ponce.
También se basaron en la ordenanza 10.771, que prevé dos reuniones anuales con gremios y propietarios de taxis para determinar aumentos en las tarifas. "Esta gestión a los taxistas les dio dos aumentos, en 2017 y 2018, cuando la inflación fue del 150% en estos dos años. El trabajador perdió su sueldo, si a eso se le suma el costo de vida de cualquier laburante estamos en el horno, en una situación extrema", advirtió Arévalo en diálogo con 0221.com.ar.
Sin embargo esa asociación carece de personería gremial, al igual que el Sindicato de Conductores de Taxis platense conducido por el dirigente Juan Carlos Berón. Ambos se arrogan la potestad de representar a los más de 2 mil taxistas de la ciudad, Berón desde la secretaría general y Arévalo desde su agrupación "Calle 43", con sede justamente en 43 entre 1 y 2.
"No lo estamos pidiendo solos sino la mayoría, sacando a uno o dos que siempre le hacen juego al poder", aseguró Arévalo, y a su vez renegó porque "quienes pagan el costo del ajuste en la ciudad son los trabajadores, no los propietarios ni los troperos".

En la vereda de enfrente está Raúl Salomone, secretario general del Sindicato Peones de Taxis, quien advirtió que "bajo ningún punto de vista" pretenden hacer un pedido de aumento al Ejecutivo. "Estamos trabajando un 50% menos que antes, imaginate lo que sería un aumento de tarifas. Hoy en día estamos haciendo 12 viajes cuando por turno se hacían 25. La situación economía de la región está quebrada y eso nos afecta a todos", sentenció.
Además, contó que una empresa de radiollamados de la ciudad "hace un 20% de descuento en los viajes" ante la merma de trabajo, por lo cual la situación estaría lejos de ser óptima como para cargarle otro aumento a los usuarios.
En esa línea, Salomone aclaró que su sindicato es "el único con personería y que representa a los trabajadores", y se mostró extrañado por el pedido de aumento que presentaron en el Concejo: "Estas cosas normalmente antes de presentarse se discuten entre las organizaciones, pero algunos se cortan solos sin evaluar nada", lanzó.

Berón, por su parte, ratificó la posición formal de su gremio de no solicitar aumentos de tarifas: "Con toda la competencia ilegal que hay y la gente que no tiene un mango, aumentar la tarifa sería una locura. Estamos totalmente en contra", destacó el mediático dirigente de los taxistas.
Sin embargo, consultado por este medio, Arévalo insistió con el pedido y recordó que "en diciembre de 2014 la Corte le ordenó al Ministerio de Trabajo que cumpla con poner un interventor en el Sindicato y llame a elecciones con un nuevo padrón, pero eso nunca se cumplió. Por ahora soy presidente de una Asociación y por eso me puedo sentar a negociar tranquilamente".

Junto con Arévalo, quienes suelen participar de reuniones en la Municipalidad por el tema tarifario son justamente Salomone, Berón y Gustavo Vitale, el titular de la Unión de Propietarios de Auto Taxi (UPAT). Según Arévalo, la UPAT también solicitó un aumento, por lo cual "de los cuatro que nos sentamos en la mesa, dos lo pedimos".
En esa línea le quitó importancia al nivel de representatividad del Sindicato Peones de Taxis, ya que según él "en La Plata hay 3.500 trabajadores y el sindicato tiene 200 afiliados y monedas". Además precisó que los dueños y propietarios suelen alquilar un taxi por turno -12 horas- a 1000 o 1500 pesos, lo que afecta profundamente la capacidad de pago de los taxistas.
Aunque desde el Municipio le restaron importancia al pedido y descartaron que se trate este año en el Concejo Deliberante, el pedido -que siempre alerta a medios de comunicación y usuarios- reabrió una grieta en la fuerte interna de los taxistas platenses.