El hijo de Diego Maradona estuvo en La Plata cuando el Jurado de Enjuiciamiento informó la destitución de la jueza Julieta Makintach.
Dieguito Fernando Maradona, hijo de Diego Maradona, estuvo en La Plata cuando el Jurado de Enjuiciamiento informó la destitución de la jueza Julieta Makintach por su participación en el documental Justicia Divina que desató un fuerte escándalo y motivó la nulidad del juicio por la muerte del exentrenador de Gimnasia.
"Dieguito quiso venir para hacer Justicia por su papá", contó la mamá de Dieguito Fernando, Verónica Ojeda, sobre la presencia del nene en la audiencia en que se conoció el veredicto del jury que captó la atención de todo el país. Al salir del Anexo de la Cámara de Senadores bonaerense, Dieguito se cruzó con la prensa y gritó: "¡Justicia por papá!".
El aumento del 10% en los micros de jurisdicción nacional elevó el costo del transporte público para quienes viajan cada día desde La Plata para trabajar o estudiar.
El hijo de Diego Maradona estuvo en La Plata cuando el Jurado de Enjuiciamiento informó la destitución de la jueza Julieta Makintach.
La decisión, por unanimidad, puso fin a dos semanas de audiencias que expusieron una trama de complicidades, grabaciones clandestinas y mensajes de WhatsApp (que involucra también a otros dos jueces a quienes les pedirán jury) que demostraron el activo rol de la magistrada en la producción audiovisual.
El hijo de Diego Maradona estuvo en La Plata cuando el Jurado de Enjuiciamiento informó la destitución de la jueza Julieta Makintach.
El documental que desencadenó la crisis, buscaba retratar el juicio por la muerte de Maradona desde la perspectiva de la jueza. Sin embargo, como quedó demostrado en las audiencias, la producción se convirtió en un proyecto que aprovechaba el nombre del ídolo del fútbol.
Las imágenes del tráiler -que mostraron a Makintach en plan protagonista- generaron tal escándalo durante el desarrollo del juicio oral que derivaron en su nulidad absoluta, invalidando meses de trabajo judicial y retrasando la búsqueda de responsabilidades por la muerte del Diez.
La destitución de la magistrada sienta al menos tres precedentes cruciales en el país:
El caso cierra un capítulo oscuro en la Justicia bonaerense, pero abre una nueva etapa de reflexión sobre los límites éticos del poder judicial en la era del espectáculo. Mientras, el juicio por la muerte de Maradona deberá recomenzar desde cero ante un nuevo tribunal en San Isidro, con una sociedad que espera, esta vez sí, que la justicia prevalezca sobre el show.