A lo largo de su historia muchos nombres jalonaron las horas de entrega y compromiso como Carmen Giménez de Karakachoff, Alicia Zeoli de Ferrando, Miguel Dente, Rodolfo Aliata o Célia Ford, esposa de Sbarra, que estuvo durante 74 años ligada a la Casa Cuna. Estos nombres sirven para homenajear a tantos que con altruismo han contribuido para concretar multiplicidad de acciones en beneficio de niños y niñas. A su vez, muchos de los profesionales se integraban como socios a la Asociación Cooperadora para contribuir a la búsqueda de recursos.
Con el fin de comenzar a recaudar fondos para la institución se pensó en hacerlo a través de reuniones sociales y eventos culturales.
Una de las primeras actividades de relevancia fue la realizada el 27 de octubre de 1970 en el viejo Almacén "San José" de 3 esquina 40. Ideado por Celia Ford, el encuentro llevó el nombre de “Café-Copa-Tango”. Aquella noche actuó como presentador y maestro de ceremonias, el escritor Juan Bautista Devoto.
El espectáculo superó las expectativas. Se vendieron las doscientas cincuenta localidades disponibles y mucha gente se quedó afuera del local colmado. La programación fue variada: En primer término se presentó el "Trío de Tango Antiguo" integrado por Germán de la O en bandoneón, Rafael Lavecchia en flauta, y Miguel Bosch en guitarra. Interpretaron tangos de gran valor histórico. A continuación, ejecutaron tangos de distintos estilos: Raúl "Coco" Bach, Pedro Lopérfido y el médico platense Cesar A. Graciani.
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Celebración 30 Aniversario de la Casa Cuna. Sbarra, Pelusso y Sambucetti.
Los amigos universitarios Norma Piacente, Carlos Bengolea y Alberto Sbarra cantaron tangos con acompañamiento en guitarras de los hermanos Julio y "Tito" Centeno. Hasta hubo una pareja de baile, integrada por Norberto Noriega y su esposa Maria E. Peirano, que deleitó a la concurrencia con su destacada participación, según recordó Oscar Bozzarelli en su libro Ochenta años de tango platense. Como cierre ofreció sus poemas Julian Centeya, autor de reconocidos tangos y poeta del lunfardo.
Otra variante fue la organización de desfiles de modas fue una iniciativa propuesta por Héctor Delmar, propietario de un importante comercio de la ciudad que realizó en varias oportunidades a partir de la década del 70.
Desde hace 12 años el Sr. Carlos Otero Arán programa eventos similares en los que se logra una excelente concurrencia. "Exportar 74" fue una mega exposición de productos industriales para la exportación. Realizada en el predio del Mercado Regional, organizada por Omar Espósito que gentilmente cedió a la cooperadora la explotación de la playa de estacionamiento de autos. Aquel dia los trabajadores de mantenimiento, algunos profesionales y miembros de la cooperadora acomodaron alrededor de diez mil coches.
En la cooperadora suelen recordar a uno de sus máximos mecenas, Pedro Campanario, presidente de la concesionario de Ford, Valsecchi SAIC, quien en varias oportunidades donó vehículos para transportar niños asi como para sortear en cenas solidarias. En 1983 cedió por dos años los beneficios económicos que se obtenían del lavadero automático y promovió la iniciativa para constituir Pro-Infantia Fundación para la Promoción del Bienestar del Niño, como entidad complementaria de la Asociación Cooperadora.
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Actuación de Pipo Pescador en el Hospital. Año 2003.
La Troupe de Médicos del Hospital Italiano realizó en octubre de 1976 una revista cómico musical que denominaron Mi Bella Dama. La representación se iniciaba con sentidas palabras del Director General del espectáculo Oscar "Cacho" Santos, pronunciadas a telón cerrado y con gran expectativa por parte de los 700 asistentes. Decía:
Son hombres de blanco
que hicieron llorar.
Galenos pintados que te harán reír
Si acaso lloraras sabe perdonar
Pero...si a caso rieras
¡Cumplido Está El Fin!
En noviembre de 1977, en el salón de los Espejos del Jockey Club el mismo grupo ofreció La Novicia Rebelde con igual éxito. Ese mismo año se montó en la vía pública la "Fiesta de las Artes", una idea original y exitosa de la galerista Nelly Thomas que la Cooperadora auspició con entusiasmo. Sobre la calle 8 entre 46 y 47 hubo una muestra colectiva de distintas expresiones artísticas que contó, como siempre, con el aporte solidario de mucha gente.
En abril de 1979, al cumplirse el quinto aniversario de la desaparición física del doctor Sbarra se organizó un homenaje coronado con una disertación del escritor Ernesto Sabato sobre "La Universidad donde se formaron hombres del temple de Sbarra". El encuentro tuvo como cierre la presentación del Cuarteto de Cuerdas de la Universidad Nacional de La Plata.
Roberto Mateos evoca a traves de varios testimonios la gran cena-show organizada por la Coorperadora a principios de diciembre de 1979 que congregó a más de dos mil personas en una gran carpa a la que asistieron artistas como José Marrone, Gogo Andréu, Ana María Campoy, Pepe Cibrián, Tristán, Darío Vittori y Mario Sánchez. La animación estuvo a cargo de Orlando Marconi, Guillermo Brizuela Méndez y Sergio Velasco Ferrero. El aporte musical fue brindado por "Mingo" Martino, Eddie Pequenino y Jorge de la Fuente. Muchos creen que aquel evento, de características tan singulares y por la cantidad de artistas presentes y el número de concurrentes solidarios no ha sido superado en la ciudad.
Entre los numerosos eventos organizados también se puede citar las actuaciones del Grupo Contemporáneo de Jazz La Plata, el Trío de Mario Weisberg, el Cuarteto de Rock Jazz de Jorge Fraccione y el conjunto Mingo Martino "All Stars" con presentación y comentarios de Talero Pellegrini; el conjunto de flauta y Coro "Musideas"; "Pro Música de Rosario"; el cuarteto de Tango Antiguo; la Troupe del Hospital Interzonal "Prof. Dr. Rodolfo Rossi"
En el citado libro de Mateos se recuerda que hubo, además, ciclos de cine, danza, participaciones en programas de TV, charlas y hasta la recordada Gran Paella de la solidaridad realizada en el Mercado Regional de La Plata gestada gracias a Miguel Di Domenicantonio: asi como memorables actuaciones de figuras de la talla de Marikena Monti, Lautaro Murua, el Chango Nieto, I Medici Concert, Maximiliano Guerra y su Ballet del Mercosur, que, como tantos y tantos artistas colaboraron para concretar estos espectáculos de excelente calidad.
Primeras obras
Pero, volvamos a los inicios de la Cooperadora. Un primer y estratégico impulso para la iniciativa fue la donación del prestigioso jurista Augusto Morello quien aportó dos millones de pesos de entonces. Siguieron otras ayudas significativas como las hechas por Juan Carlos Rizzo y Rogelio González (hijo).
El crecimiento de la demanda generaba la necesidad de adecuación de la infraestructura. Una de las primeras reformas edilicias de relevancia hechas con fondos surgidos de la Cooperadora se produjo en 1976. Se trató de la remodelación de los consultorios externos con recursos conseguidos por la Cooperadora. El proyecto y dirección de la obra correspondió al arquitecto Carlos Malaret. Se sumaron dos unidades odontológicas ademas de instrumental y materiales necesarios que otorgó el Ministerio de Salud.
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Inauguración de obras. Roberto Mateos, Celia Ford de Sbarra e Irma
Casal. Año 1994.
Tres años después, en 1979 se efectuaron remodelaciones del Lactario, separando el sector de preparación de los biberones del sector de limpieza de mamaderas y tetinas. La Cooperadora compró un procesador automático; un
nuevo autoclave para esterilización; un moderno refrigerador comercial y canastos de acero para el transporte de las mamaderas a las salas. Todo esto facilitó una preparación, conservación y traslado muy higiénica y libre de contaminación".
En junio de 1992, la Dirección de Lotería de la Provincia de Buenos Aires, otorgó parte de los recursos que se obtienen del Bingo Platense a la Asociación Cooperadora del Hospital Noel Sbarra, lo que resultó esencial para realizar las obras necesarias para un mejor desenvolvimiento institucional. La comisión directiva, presidida por la señora Ford, y con el asesoramiento del abogado Roberto Lavigne, llevó adelante engorrosos trámites para acceder a este importante beneficio que posibilitaron dotar de recursos materiales indispensables.
Fue durante la gestión al frente del hospital del doctor Luis Domingo Garcia Azzarini, iniciada en 1995, que, con la autorización del Ministerio de Saud se encaró la ampliación del hospital con una inversión de casi un millón de dólares. En diciembre de ese año, el Ministerio de Salud autorizó la renovación del Consejo de Administración en el que fueron designados los pediatras Jorge Marcó y María Alicia Marini, ademas de Angela Mahmud, por el personal no profesional.
En esta etapa se construyeron siete nuevos consultorios externos, una amplia y confortable sala de espera. También se amplio la biblioteca incorporando una sala de lectura y otras dependencias para los servicios de Odontopediatría, Neurología, Clínicas Interdisciplinarias del Desarrollo y Fonoaudiología, además de oficinas para el Área Docente.
En total se sumaron 1510 metros cuadrados. Inaugurado en agosto de 1999, el nuevo edificio se construyó mediante una licitación en terrenos cedidos por el gobierno bonaerense, previa gestión ante la Dirección de Menores. A los recursos reunidos por la Cooperadora se sumaron aportes de la Secretaría de Desarrollo Social de la Nación, que cubrió alrededor del 60 por ciento del costo de las obras.
Nuevos espacios y equipos
Este plan de expansión incluyó la remodelación de todas las salas del hospital que fueron revestidas con cerámicos decorados con motivos infantiles, siguiendo un proyecto de la arquitecta Mirta Pascale, quien hizo su aporte profesional en forma desinteresada.
También se construyeron un recinto para la instalación de un equipo generador de energía eléctrica de alta potencia, un nuevo tanque de agua con capacidad para 20 mil litros, se impermeabilizaron todos los techos y terrazas, se repararon heladeras y cámaras frías, bombas y desagües cloacales, ascensor y montacargas y reciclado de varias dependencias, entre ellas, la remodelación total del lavadero con cinco lavadoras automáticas, un calefactor para la cámara de secado y todos los recursos técnicos correspondientes a esta moderna realización con una inversión de 35.000 dólares.
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Noel Humberto Sbarra dejó un legado dedicado a la infancia.
En cuanto al equipamiento se incorporó una computadora, dos camionetas nuevas, se mejoró el sistema de comunicación interna y externa con nuevas líneas telefónicas; se adquirió el primer ecógrafo e instrumental para el Servicio de Odontología; se instaló oxígeno central para evitar el desplazamiento de los tubos; y se renovaron las cunas en varias salas.
Estas obras no hubieran sido posibles sin el esfuerzo y entrega de los integrantes de la Asociación Cooperadora y la valiosa colaboración de la comunidad platense. La Cooperadora tuvo a su cargo desde la solicitud del proyecto, el concurso de precios, hasta el pago de los certificados y del equipamiento de todas las obras.
Distintas instituciones de la comunidad platense también colaboraron con el amoblamiento, entre ellas: la Municipalidad de La Plata a través del Banco Municipal, el Distrito 1 del Colegio de Médicos de la Provincia de Buenos Aires, la Agremiación Médica Platense, ASOME y la Sociedad Argentina de Pediatría. Por su parte, el Ministerio de Salud se encargó de proveer los elementos técnico-profesionales para los cuatro consultorios de Odontopediatría.
Un espacio singular del hospital es la biblioteca donde pueden hallarse cerca de dos mil volúmenes con valioso material médico, educativo, revistas periódicas, muchas de ellas especializadas en pediatría, además de diversas publicaciones de organismos nacionales e internacionales vinculados con la salud pública. Además, se encuentran allí las colecciones personales de los exdirectores del nosocomio, Noel Sbarra y Marcos Cusminsky, que, en rigor, sirvieron de base del actual fondo documental. En un principio tenía casi exclusivamente un uso interno pero ahora el lugar está abierto al público.
Siguiendo la esencia
Las particularidades de cada logro, de cada acción concretada han permitido adquirir una experiencia provechosa para afrontar cada día y disminuir los problemas. En ese sentido, las respuestas ante las múltiples problemáticas profesionales, técnicas, organizativas y administrativas no han sido rígidas ni las mismas en todos los tiempos, pero siempre siguieron la esencia y el espíritu de la institución.
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Luis García Azzarini, Director Ejecutivo y Rodolfo Aliatta, Presidente
Asociación Cooperadora. Año 2001
De las variadas acciones concretadas durante estos años, la incorporación de la Residencia de Pediatría con Orientación Comunitaria es una de las más importantes. Original manera de formar médicos pediatras con una innovadora modalidad de capacitación, con énfasis en la problemática de salud del niño y sus entornos comunitarios y familiares.
A partir de 2008 los Residentes ingresantes serán cuatro. Importante reconocimiento por parte de las autoridades del Ministerio de Salud, por los esfuerzos realizados por los profesionales del Hospital para que esta iniciativa lograra concretar los objetivos propuestos. Durante esta gestión, con recursos de la Asociación Cooperadora también se realizaron remodelaciones, adecuaciones y equipamiento de la Unidad de Diagnóstico por imágenes, Fonoaudiología, Sala de internación conjunta niño-madre, Laboratorio y Lavadero. Con aportes y construcción por parte de la empresa Credil SA, se remodeló el Lactario, se puso en funcionamiento una nueva Sala de Cuidados Especiales de mediana complejidad y dependencias anexas.
Entre otras distinciones la labor de la Cooperadora ha sido reconocida por la Sociedad Argentina de Pediatría “por sus destacadas actividades de participación comunitarias”.
"En estos 56 años de vida, nuestra institución ha sabido acompañar el crecimiento y la transformación de lo que fue la querida Casa Cuna al hoy imponente Hospital Zonal Especializado Dr. Noel H. Sbarra. El secreto fue privilegiar el bien común en base al enorme amor por el cuidado de los chicos. En más de medio siglo de vida, el espíritu siempre fue el de trabajar con profesionalismo y sensibilidad" señala Luis Mansur, actual titular de la Cooperadora, para quien "hoy, cuando las necesidades que se multiplican, gracias a la coordinación y al asesoramiento del doctor Nery Fures, Director Ejecutivo del Hospital, seguimos colaborando en el mantenimiento edilicio y en su crecijiento asi como en la adquisición de elementos indispensables para el funcionamiento y en actividades de recreación, talleres y jornadas de salud. Creemos firmemente que apoyar al hospital es pensar en el porvenir de nuestras infancias. Y seguir el legado de referentes como el doctor Sbarra, es la responsabilidad que asumimos con orgullo", completa Mansur.
En un ambiente de gran camaradería los miembros de la Asociación Cooperadora del Hospital Noel Sbarra trabajan en forma responsable y mancomunada desde hace ya 56 años. Es una acción imprescindible de nexo entre la comunidad y esta Institución que pretende estar siempre abierta a sus necesidades y aportes. De lunes a viernes de 9 a 12 atienden para asociarse o colaborar en la dirección de correo [email protected] donde siguen sumando voluntades para la hermosa obra de la Casa Cuna, como todos siguen llamando al lugar.
