domingo 15 de junio de 2025

Un prestamista irrumpió en una casa de Berisso por una deuda y amenazó con incendiarla y matar al dueño

Una familia de Berisso fue atacada por un joven que exigía el pago de un préstamo. Golpeó al dueño, robó y dejó una amenaza cargada de terror antes de huir.

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Un hecho de extrema violencia ocurrió este sábado por la mañana en Berisso, cuando una familia fue brutalmente agredida por un joven prestamista que exigía el pago de una deuda. El atacante ingresó por la fuerza a la vivienda, golpeó al dueño y dejó un mensaje amenazante.

El violento episodio tuvo lugar alrededor de las 9.30 en una casa ubicada en 12 entre 124 y 125. El agresor, de 25 años, irrumpió armado con un palo, golpeó al dueño de casa y se llevó varios objetos de valor, además de dinero en efectivo.

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Según el testimonio de las víctimas, el conflicto se originó por un préstamo impago que el dueño de la casa debía pagar en tres cuotas.

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El hecho conmocionó no solo a la familia atacada, sino a los vecinos de Berisso por el nivel de agresividad

El hecho conmocionó no solo a la familia atacada, sino a los vecinos de Berisso por el nivel de agresividad

Un préstamo, amenazas y violencia

Dentro de la vivienda se encontraba una mujer con su esposo y su hija menor cuando, de manera repentina, un fuerte golpe en la puerta marcó el inicio del ataque. En cuestión de segundos, un joven desbordado por la furia irrumpió gritando: "¿Hasta cuándo voy a esperar?".

El prestamista comenzó a tomar pertenencias con total impunidad mientras el dueño de casa intentaba frenarlo. Sin embargo, el atacante lo golpeó con violencia en el rostro, dejándolo inconsciente en el comedor. Luego, arrasó con todo a su paso. Se llevó una mochila, ropa, documentación personal, un televisor y unos 30.000 pesos en efectivo.

"Voy a mandar a matarte. Te voy a prender fuego la casa", advirtió el atacante antes de escapar, dejando a la familia aterrorizada y al hombre tendido en el suelo.

Según se pudo indagar, el dueño de la vivienda le había pedido 500 mil pesos y se comprometió a devolver el dinero en tres cuotas de 300 mil, pero solo abonó la primera y, por falta de trabajo, no pudo hacerse cargo de los últimos pagos.

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