El cuñado de Virginia Franco habló de sus sospechas en torno al crimen de City Bell y apuntó a un hombre que manejaba las cuentas de la psiquiatra.
El crimen de la psiquiatra Virginia Franco sigue envuelto en un fuerte misterio y su cuñado, Armando, planteó nuevas sospechas sobre un hombre que ayudaba a la profesional de City Bell con trámites digitales y financieros. La investigación en La Plata continúa centrada en varias líneas mientras se analizan sus vínculos personales y laborales.
El hombre es hermano de quien fuera esposo de Franco, que murió en 2024, y recientemente brindó una entrevista en la que aportó detalles que la familia considera relevantes para entender el contexto del crimen. Armando aseguró que las referencias que manejan provienen de la propia Fiscalía y remarcó que la causa permanece “en plena investigación”, con “dos o tres líneas de trabajo”.
Los trabajadores del Hospital Alejandro Korn publicaron un sentido mensaje de despedida para la profesional que fue hallada muerta en su casa de City Bell.
Las fotos del crimen de la psiquiatra Virginia Franco, en City Bell, muestran desorden extremo y accesos sin violentar, claves para la investigación.
Según relató, Franco tenía dificultades para manejar la computadora y sus cuentas, una tarea de la que se ocupaba su esposo hasta su muerte, ocurrida el 15 de abril del año pasado. Ante esa situación, la profesional recurrió a una paciente de la Clínica San Juan -donde trabajaba- quien la vinculó con un hombre que comenzó a asistirla en cuestiones digitales.
"Este hombre le manejaba todas las vinculaciones electrónicas con la computadora y, a su vez, fue tomando confianza", afirmó Armando en diálogo con el programa Tarde o Temprano, de Canal 13 y agregó: "Por lo que ella nos refería, empezó a manejarle las cuentas”.
El cuñado de la psiquiatra Laura Franco habló del vínculo con el hombre que le manejaba las cuentas
En esa línea, el cuñado de Franco aseguró: “Hay que entender que ella era cero por su edad, próxima a los 70 años, no manejaba absolutamente nada, y mi hermano le hacía todos los movimientos de asentamiento, porque ella estaba jubilada de IPS, y seguía trabajando particularmente. Entonces, los bonos del ejercicio libre, hay que asentarlo y hacer la rueda de los seis meses para cobrar. Esa tarea ella no la manejaba”, agregó.
El hombre apuntado en un principio como sospechoso pero luego liberado tras colaborar con la investigación es Pablo Adrián Bozza. Solo declaró como testigo y colaboró con la causa, mientras los investigadores se enfocan en identificar al autor del brutal asesinato en La Plata.
El hombre, de 47 años, divorciado y amigo de la víctima, fue quien se comunicó con la Policía Bonaerense el sábado por la mañana luego de no poder contactar a Franco durante todo un día. Él mismo se presentó además en la puerta de la vivienda de City Bell y alertó que la tranquera estaba abierta.
Virginia Franco fue hallada muerta en su casa de City Bell
Bozza dijo ser amigo de la psiquiatra y desempeñarse como Gerente Operativo en la Caja de Seguridad Social para los Psicólogos de la provincia de Buenos Aires. Testimonios vecinales recogidos por la Policía habían generado dudas sobre su rol, pero la Justicia despejó ese escenario y lo consideró únicamente un testigo.
Pese a los datos aportados, Armando afirmó que aún no logra comprender cuál podría haber sido el móvil del homicidio. Recordó que la casa no estaba desordenada, salvo por lo propio del trabajo policial para revisar el lugar y buscar el celular de la víctima, uno de los elementos clave para los investigadores.
La causa continúa avanzando mientras se profundiza el análisis del entorno personal y profesional de la psiquiatra, en busca de precisiones que permitan esclarecer el brutal asesinato.