La terrible historia de una joven quien denunció que el 6 de septiembre protagonizó una estafa telefónica por una persona que se comunicó por teléfono con ella diciéndole que era empleada de una tarjeta de crédito de la que ella es cliente.
La víctima es cocinera en el penal de General Güemes, en Salta. El estafador se presentó como personal de la seguridad electrónica de la tarjeta y le sugirió que transfiera su sueldo desde el banco a su cuenta de la tarjeta, por razones de seguridad. Hilda María Alarcón, de 27 y madre de una nena de 6 años, le hizo caso al supuesto empleado de la tarjeta de crédito y transfirió la totalidad de su dinero depositado en el banco, 275.000 pesos, a su cuenta de la tarjeta.
Minutos más tarde la notificaron de un préstamo aprobado por el banco por la suma de 2.300.000 pesos, que nunca había solicitado. Ahora la mujer engañada debe pagar 48 cuotas de 230 mil pesos. Al acudir a la casa central del banco, le informaron que su préstamo ya había sido transferido. El CBU a donde se dirigió el dinero perteneciente a un tal José Andrés Vargas, Alias: seguridad.nx103 y con un número de CBU. El CUIT es 20-39680038-22.
La joven contó que el empleado del banco le señaló que debía borrar todo lo que tenía en su celular, que el aparato tenía un virus. Además, le aseguró que personalmente jamás le podrían haber autorizado un préstamo a 48 meses con ese único ingreso que tiene.
"Estuve a punto de suicidarme, no lo hice por mi hija. No sé qué voy a hacer, de qué voy a vivir si a fin de mes el banco se descuenta todo mi sueldo, y aún así voy a quedar debiendo un poco, que seguramente se lo cobrará del salario universal de mi hija y me va a dejar sin sustento", explicó. Y continuó diciendo: "Todo lo que digo ya fue denunciado y pruebas tengo de la estafa que sufrí al transferir de mi cuenta sueldo el dinero hacia una tarjeta. Necesito la acción de la Justicia, urgente", reflexionó la mamá.