A poco más de 10 días de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) que sacudieron el escenario político en todo el país, la candidata de la intendenta de La Plata por el Frente de Izquierda y los Trabajadores - Unidad (FIT-U), Luana Simioni, visitó los estudios de Ciudadanos puntualizó los desafíos que tiene su espacio de cara a las elecciones generales de octubre próximo y sintetizó por qué la izquierda podría convertirse en una alternativa en la ciudad: "La rebeldía (expresada en las urnas el último domingo) no puede ser por derecha, privatizar la educación y la salud y vender un órgano para llegar a fin de mes no pueden constituirse en el programa de salida para las mayorías populares", disparó.
"Las PASO fueron un shock para muchos y sin dudas un mensaje político, sobre todo para los partidos que vienen gobernando en las últimas décadas, del malhumor social que se tradujo en un voto que dio como resultado, contradictoriamente, la victoria de un espacio político que si concretara su programa nos dejaría peor de lo que estamos", analizó la trabajadora social y delegada del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA). En esa línea no solo cuestionó con dureza al candidato más votado en las primarias, el líder libertario Javier Milei; sino que además adelantó que la izquierda tiene por delante el enorme desafío de "organizarse y pelear por una alternativa clara y un programa claro que sea en favor de las mayorías populares".
Simioni explicó que, más allá de la abundancia de recursos económicos y exposición mediática, el candidato presidencial de La Libertad Avanza (LLA) logró sintetizar de manera sencilla propuestas que serían "impracticables" y convencer, por ejemplo, que la dolarización es un camino viable para terminar con la inflación, uno de los principales males que azota a los trabajadores de todo el país licuando día a día sus salarios. "Milei se ha constituido en una salida sencilla con ideas sobre las que si uno pone la lupa son tremendas", remarcó al respecto, añadió que sería un error cuestionar a las familias "empobrecidas por todos los gobiernos" por buscar un canal para expresar ese malestar y cerró que el FIT-U tiene por delante el desafío de interpelar a ese electorado descontento que en las primarias se vio más seducido por las propuestas de la derecha.
EL DESAFÍO DE LA IZQUIERDA EN LA PLATA
La candidata, que lidera en la ciudad el único espacio de izquierda que logró alcanzar el piso de los votos necesarios para superar las PASO, se mostró esperanzada con alcanzar los votos necesarios para llegar al Concejo Deliberante con una "voz disruptiva" en "un lugar en el que se cocina de todo pero nadie se entera nada" y apuntó, en esa línea, contra las dos principales coaliciones que se disputan la conducción de la ciudad: "Si uno mira las opciones políticas en la ciudad, tenemos a Julio Garro que está gobernando hoy y es el responsable de la enorme desigualdad y precarización que hay en la ciudad y del otro lado la alternativa es Julio Alak que gobernó 16 años y es el padre de la criatura, porque no puede desresponsabilizarse de un Código de Ordenamiento Urbano (COU) hecho para las grandes constructoras inmobiliarias, de la enorme precarización y los salarios de indigencia que también había entre los municipales bajo su mandato".

En ese marco indicó que el FIT-U intentará seducir a quienes acompañaron en las PASO a Juan Grabois -el precandidato presidencial de Unión por la Patria (UxC) que compitió en la interna oficialista y cayó ante el actual ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa- y lo eligieron "como un voto anti ajuste y anti Fondo Monetario Internacional (FMI), un electorado que no quiere que el único destino sea juntar dólar sobre dólar para pagar la deuda".