El Gobierno nacional anunció una nueva serie de flexibilizaciones de todas las restricciones por el COVID-19, de cara al 1 de octubre; pero aún no hubo aclaraciones respecto de cómo seguirán comportándose las universidades que, hasta ahora, habían limitado al mínimo la presencialidad para dar paso a un sistema mixto, pero mayormente con virtualidad.
En principio el nuevo ministro de Educación argentino, Jaime Perczyk, advirtió que una de sus prioridades es precisamente ampliar la presencialidad en el nivel universitario. La mayoría de las casas de estudios cuentan actualmente con algún tipo de presencialidad, pero es el nivel educativo más rezagado si se lo compara con las escuelas primarias y secundarias. Casi todos los estudiantes de universidades harán dos años completos en forma virtual.
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Desde fines del año pasado, la Universidad de Buenos Aires (UBA) volvió a dictar materias prácticas de forma presencial. Según registros oficiales, 18 mil alumnos de los últimos años regresaron a las aulas en las facultades de Odontología, Agronomía, Veterinaria, Exactas, Farmacia y Bioquímica, Medicina e Ingeniería. Además, desde el segundo cuatrimestre de este año, hubo un regreso progresivo de las clases teóricas presenciales comenzando por la facultad de Ciencias Económicas, además del Programa que la UBA tiene en Barrio 31 junto a Scholas Ocurrentes para dictar el primer tramo del CBC.
Por otro lado en octubre comenzarán encuentros presenciales para los estudiantes ingresantes del CBC; al tiempo que los más de 100 mil estudiantes que cursan actualmente el ciclo básico y UBA XXI tendrán exámenes presenciales en el turno noviembre/diciembre.
En la Universidad de La Plata (UNLP), otra de las grandes instituciones a nivel nacional, precisaron que desde hace varios meses hay una "presencialidad en materias que no son compatibles con la virtualidad" y a ello se sumó "la posibilidad de rendir en persona los exámenes". "A la altura en la que estamos del cuatrimestre, volver a la presencialidad plena sería una locura porque hay un montón de chicos que se han quedado en sus pueblos. El 40% de nuestra matrícula se compone de estudiantes del interior de la provincia y del país", precisaron las autoridades de la casa de estudios local a Infobae.
En la Universidad de Córdoba (UNC) advierten que la situación es más variable y el nivel de presencialidad suele depender de cada facultad. Las puertas se reabrieron en Odontología, Medicina o Ciencias Químicas, donde se necesitan de las materias prácticas. Pese a la flexibilización que anunció el Gobierno, no habrá un retorno de estudiantes "de manera abrupta", precisaron desde la casa de estudios.
En octubre todos los rectores de universidades públicas se reunirán en el marco de una nueva sesión del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) para planificar el 2022, año en el que sí se espera un regreso a la presencialidad "pre pandemia" con los cuidados necesarios y la chance de ofrecer procesos híbridos de educación con la experiencia previa de la virtualidad.
Por su parte Rodolfo de Vincenzi, presidente del Consejo de Rectores de Universidades Privadas (CRUP), planteó que "no necesariamente cada universidad cree que aumentar el nivel de presencialidad hoy es lo que más les conviene a los alumnos. Incluso dentro de cada institución va a haber respuestas dispares según la carrera que se trate y la materia". "Si hay algo que va a caracterizar a la educación superior de ahora en más, es la diversidad", cerró.