En las últimas horas, el Ministerio de Educación de la Nación y las cámaras que agrupan a las instituciones educativas de gestión privada llegaron a un acuerdo. En una lista compuesta por nueve puntos, se les recomienda a los colegios que congelen el valor de las cuotas hasta que termine la cuarentena obligatoria, y retrotraigan cualquier aumento anterior al decreto que ordenó la emergencia sanitaria en todo el país.
Asimismo, se aconseja suspender el cobro de servicios directos interrumpidos, como el comedor, y el de las actividades extraescolares, como los talleres por los que algunos alumnos pagan. En esta línea, se les sugiere flexibilizar, reprogramar o extender las fechas de vencimiento de las cuotas, y suprimir las penalidades por mora en los pagos, al menos por el tiempo que dure el aislamiento social y obligatorio.
Según el comunicado, estos puntos fueron redactados en un momento donde prima la emergencia por el COVID-19, y "teniendo en cuenta la realidad de cada una de las 24 jurisdicciones y de las distintas escuelas de gestión privada". Nicolás Trotta, ministro de Educación de la Nación, explicó: "En la reunión primó una mirada común y colectiva de solidaridad que nos compromete como sociedad a garantizar el derecho a la educación, entendiendo la difícil situación que atraviesan las economías familiares en momentos de aislamiento obligatorio".
"Pero también es importante comprender la necesidad de mantener las fuentes de trabajo y el pago de los salarios del personal docente y no docente". El objetivo, señala el documento, es "atender las necesidades de las familias, de los docentes y no docentes y de las propias instituciones; coincidiendo en los principios de solidaridad, compromiso, sensibilidad responsabilidad y esfuerzo compartido", cerró.