Cientos de policías volverán este lunes a rastrillar una basta zona de Melchor Romero, donde intentan dar con Exequiel Sanso, el chico de 17 años del que nada se sabe desde la madrugada del 1º de enero, cuando en su casa fueran brutalmente asesinados su mamá, Graciela Holsbak, la pareja Raúl Bravo y la niña Alma Manino, de cinco años, nieta de la mujer y sobrina del joven buscado.
El rastrillaje será el segundo de semejante envergadura, después de que el domingo más de 150 policías salieran a recorrer una zona descampada y con una cantera sin más resultados que el hallazgo de una gorra celeste, propiedad de un adolescente que huyó del lugar cuando los uniformados empezaron a acercarse a la zona.
Como el domingo, participarán del operativo policías de la montada, motorizados y a pie, todos coordinados con personal de la DDI y bomberos. Fuentes policiales informaron a 0221.com.ar que los trabajos de búsqueda siguieron durante toda la noche, pero los rastrillajes intensos serán retomados este lunes, aunque no indicaron el lugar ni la hora.
Durante el domingo, en más de cuatro horas de labor, los agentes recorrieron distintos terrenos desde 526 y 175 hasta 32 y 177. La búsqueda fue exhaustiva y sacudió la calurosa tarde del domingo en un barrio que vive en la incertidumbre desde las primeras horas del año. En ese sector, la 526 es una calle asfaltada angosta, rodeada de pajonales. Hacia 527, hay un descampado al que se accede por un huella de tierra por la que la comitiva policial se introdujo.
El destino era la cantera ubicada a la altura de 527 y 175 y los medios usados y el personal involucrado abarcó a distintas reparticiones. Efectivos policiales de Montada, Infantería y Motorizada. Además del personal de la comisaría de la zona y de la Policía Científica. El impactante despliegue se completó con la presencia de un móvil de Bomberos.

Fue durante el rastrillaje que las autoridades se detectó un gorra celeste propiedad de un joven que escapó corriendo mientras el operativo llegaba a 38 y 175, una zona en la que muchos invernáculos. Las mismas fuentes indicaron que la contextura física del chico es semejante a las del adolescente buscado, por lo que no se puede descartar que sea él. De ahí la necesidad de profundizar la búsqueda.
La causa es investigada por el fiscal Marcelo Martini, quien viene asegurando que Exequiel Sanso no lo está acusando de ningún delito. “Vivía ahí con ellos (por las victimas). Había días que no estaba. Se lo está buscando”. Su objetivo es tomarle testimonio teniendo en cuenta que residía con las víctimas: "Quiero encontrarlo y que me explique por qué no estaba en el lugar donde vivía", aseguró.