La Facultad de Psicología de la UNLP comenzó a trabajar para poner en marcha en el 2020 la Tecnicatura Universitaria en Acompañamiento Terapéutico en su sede de La Plata. La iniciativa tiene como objetivo principal brindar una respuesta ante la fuerte demanda social que reconoce el valor que tiene para un paciente estar en su propio hogar o institución, acompañado por un profesional de la salud.
La Universidad ya cuenta con una vasta experiencia profesional ya que este año comenzó a dictarse en el Centro Universitario de Chivilcoy y tiene una matrícula de 200 alumnos. El plan de estudios que se implementó en ese espacio de extensión cuenta con la aprobación del Ministerio de Educación de la Nación.
"Con esta nueva carrera de tres años de duración, la Facultad de Psicología de la UNLP se propone formar un profesional con un fuerte compromiso ético que contribuya a mejorar la calidad de vida de las personas que la requiera”, afirmó el decano de la unidad académica, Xavier Oñativia. En ese sentido, consideró que esta especialidad “proporciona una salida laboral inmediata, a partir de la fuerte demanda social proveniente tanto del campo de la salud como de la comunidad en general, y el reconocimiento que tiene la profesión por parte de las obras sociales”.
El acompañante terapéutico es una persona que está capacitada para insertarse en la vida cotidiana del paciente que presenta alguna patología física, psíquica o psiquiátrica, discapacidades momentáneas o crónicas para su cuidado, atención, acompañamiento o integración socio-comunitaria. En concreto, el profesional podrá asistir a adultos mayores o personas con trastornos de la personalidad del desarrollo, jóvenes en conflicto con la ley penal, dificultades de psicomotricidad, a niños en contexto escolar y a todos aquellos que presenten problemáticas de consumo de sustancias psicoactivas.
El dictado de esta tecnicatura corresponde con el nuevo esquema de formación en materia de salud mental promovido con la UNLP, en respuesta a la nueva Ley Nacional. Es importante destacar que la Universidad formó parte del Órgano de Revisión Local de Salud Mental, y la Facultad de Psicología impulsó una profunda revisión de los viejos paradigmas basados en la lógica del manicomio y el encierro.
La Ley de Salud Mental establece el derecho a recibir tratamiento y a ser tratado con la alternativa terapéutica más conveniente, es decir, aquella que menos restrinja los derechos y libertades, promoviendo la integración familiar, laboral y comunitaria. Para ello promueve que la atención en Salud Mental esté a cargo de un equipo interdisciplinario integrado por profesionales, técnicos y otros trabajadores capacitados con la debida acreditación de la autoridad competente.

El modelo formativo ofrece un marco epistemológico-formativo que incluye contenidos teórico-técnicos para la construcción de un técnico con capacidad para intervenir en los dispositivos interdisciplinarios, ya sea en ámbitos de las políticas públicas de salud, educación, seguridad, niñez y adolescencia.