El presente de Croacia y de su jugador emblema Luka Modric no podría ser mejor, o sí, ganando el próximo domingo cuando juegue la final con Francia por primera vez en su historia. La realidad paralela pasa por el futuro inmediato de Modric una vez finalizado el torneo, ya que fue acusado por falso testimonio en favor de Zdravko Mamic, hombre fuerte del fútbol croata y padre de Mario, representante del futbolista, quien se encuentra preso por un caso de corrupción.
Mamic fue condenado a seis años y medio de prisión por un caso de traspasos fraudulentos y malversación de fondos en los pases de diferentes jugadores, entre ellos justamente la transferencia de Luka Modric del Dinamo Zagreb al Tottenham en el 2008.
La Justicia de Croacia investiga al jugador porque considera que en primera instancia expuso una declaración y luego la cambió en favor del acusado. En caso de confirmar el delito, el crack croata podría recibir una condena de cinco años de prisión. La historia se definirá terminada la cita mundialista en Rusia, donde el joven podría convertirse en héroe de su país, un ídolo que, sin embargo, poco podrá disfrutar de su éxito en la cárcel.