El Ejecutivo trabaja en la reglamentación de la Ley de Inocencia Fiscal para facilitar el ingreso de dólares e impulsar una remonetización.
El Gobierno nacional avanza con la reglamentación de la Ley de Inocencia Fiscal con el objetivo de incentivar que los argentinos ingresen al sistema formal los dólares que guardan en sus hogares como atesoramiento. La iniciativa busca impulsar la remonetización de la economía, fortalecer reservas y dar previsibilidad tributaria.
Tras la aprobación de la normativa en la Cámara de Senadores, el Ejecutivo tiene la intención de que comience a aplicarse plenamente en 2026 y permita el ingreso al sistema formal de las divisas ahorrados fuera del circuito financiero. Según se informó, la medida será reglamentada por la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) y la Unidad de Información Financiera (UIF) y es considerada clave dentro de la nueva etapa del programa monetario oficial.
El Senado debatirá la ley de Inocencia Fiscal que eleva los montos para denunciar evasión. ARCA solo podrá actuar penalmente desde cifras mucho más altas.
La Tasa de Capitalidad es un tema que forma parte de la agenda que los diputados de La Libertad Avanza impulsarán el año que viene en la Legislatura.
En el armado libertario reconocen que existe un fuerte interés en ponerla en marcha cuanto antes, aunque admiten que los cambios en la Ley Penal Tributaria "no son tan sencillos" de instrumentar. En paralelo, las entidades financieras aguardan la letra chica de la reglamentación e incluso en el sector bancario señalaron que hay confusión sobre los alcances de la norma, por lo que elevaron consultas al Banco Central de la República Argentina (BCRA).
En medio de las definiciones, el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, instó públicamente a los bancos a no trabar el proceso de formalización de divisas. A través de su cuenta de X, advirtió que los ahorristas a los que se les pidan "cosas de más" podrán recurrir al Banco Nación (BNA), donde –según afirmó– se dará la instrucción de cumplir estrictamente con la ley.
El funcionario remarcó que, de acuerdo con el espíritu de la normativa, quienes adhieran al régimen solo deberán demostrar que están inscriptos en el sistema de Ganancia Simplificada, sin exigencias adicionales por parte de las entidades.
La ley crea el Régimen Simplificado de Ganancias, destinado a contribuyentes con ingresos anuales menores a $1.000 millones y un patrimonio inferior a $10.000 millones, siempre que no sean considerados grandes contribuyentes. Con este esquema, ARCA dejará de controlar los consumos y el patrimonio de quienes adhieran. El cálculo del Impuesto a las Ganancias se basará únicamente en los ingresos facturados y los gastos deducibles. Si el contribuyente paga en tiempo y forma el monto determinado por el organismo, quedará liberado de cualquier otro reclamo por ese tributo.
Además, los adherentes podrán realizar operaciones de envergadura, como la compra de autos o inmuebles, sin quedar bajo la lupa del fisco. Tampoco bancos, concesionarias, escribanías ni tarjetas de crédito estarán obligados a informar esas transacciones.
La norma también introduce modificaciones en el Régimen Penal Tributario, con una actualización de los montos que determinan delitos fiscales. El piso para la evasión simple se eleva de $1,5 millones a $100 millones, mientras que la evasión agravada pasa de $15 millones a $1.000 millones.
La Ley de Inocencia eleva el piso del delito de evasión simple de $1,5 millones a $100 millones y el de la evasión agravada de $15 millones a $1.000 millones
Otro punto central es la posibilidad de extinguir la acción penal si el contribuyente cancela la deuda y los intereses antes de que se formule la denuncia. En caso de que el proceso ya esté iniciado, podrá cerrarse con el pago total más un 50% adicional dentro de los 30 días, una opción que solo podrá utilizarse una vez por persona o empresa.
Finalmente, la ley reduce los plazos de prescripción para que el Estado revise y reclame impuestos, con un esquema de tres, cinco o diez años, según el nivel de cumplimiento fiscal del contribuyente.