El informe más reciente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios refleja la caída del consumo producto de la pérdida de poder adquisitivo.
La crisis económica sigue golpeando con fuerza a los argentinos y se ve reflejado en la caída de consumo, que en agosto alcanzó el 7,8%. La baja impactó especialmente en los sectores de recreación e indumentaria, dos de los rubros más afectados por la pérdida de poder adquisitivo de las familias
El dato se desprende del Indicador de Consumo (IC) de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC). El consumo cayó 7,8% interanual en agosto, mientras que la inflación mensual fue de 4,2%. Para la entidad, la leve aceleración del índice de precios durante el octavo mes del año “afectó negativamente al consumo”.
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El índice de consumo que mide la CAC anotó una caída acumulada de 6,4% en el período enero-agosto contra el mismo lapso del año previo. Los especialistas que elaboraron el informe señalaron que “si bien la inflación se estabilizó durante los últimos cuatro meses, el ingreso real se mantiene en niveles bajos y el consumo no muestra señales de recuperación”.
De acuerdo al análisis, la actual inflación tiene un impacto mayor sobre la clase media asalariada y profesional, a lo que se agrega la reducción del ingreso por el pago del impuesto a las Ganancias, del cual la gran mayoría estaba exento. Además, se estima que en septiembre actuarán en contra de la recuperación del consumo el aumento de las tarifas del transporte público y el agua.
Según el informe, con un retroceso de 21,7%, el rubro recreación y cultura fue el que más cayó frente a agosto del 2023. En segundo lugar quedó indumentaria, con una baja de 17%.
“La dinámica del consumo en recreación y cultura es la esperable: con un ingreso real en niveles bajos el consumo de ocio se ha postergado”, precisaron los especialistas. Mientras que, respecto al rubro indumentaria y calzado, indicaron que "el sector sigue deprimido y las ventas han mostrado una fuerte contracción debido a la caída del ingreso real de los hogares".
Por su parte, el rubro transporte y vehículos mostró un retroceso del 13,1% e hizo una contribución negativa de 1,7% a la variación interanual. El reporte indicó que la contracción en los patentamientos de autos y la suba de la nafta justificaron el comportamiento del índice.
En tanto que viviendas, alquileres y servicios públicos no registró ningún tipo de variación, al anotar un índice mensual de 0%. “La demanda de energía eléctrica experimentó un incremento interanual que mantuvo constante el consumo en este rubro”, sostuvo el informe.