Cristina Kirchner estuvo en Corrientes en un acto por la campaña del actual intendente de Paso de los Libres, Martín "Tincho" Ascúa, como candidato a gobernador, y en el marco del posible fallo de la Corte Suprema que trascendió las últimas horas la ex presidenta denunció una persecución judicial en su contra.
La ex mandataria y dirigente peronista fue contundente en su discurso al referirse sobre las causas judiciales que pesan en su contra y expresó "me gatillaron en la cara, porque me quieren presa o muerta".
La líder del PJ señaló que "tenemos que tener en claro que nuestra obligación como militantes nacionales y populares es no llorar sobre la leche derramada, sino la de volver a organizarnos", y agregó sobre el posible fallo que "no hay que enojarse, hay que estar atentos a que me metan presa".
También lanzó críticas sobre el gobierno de Javier Milei, y sentenció que "este proyecto político que no tiene plan económico es un remake bastante ineficiente de la tablita de Martínez de Hoz y la convertibilidad de Cavallo. Es como el yogur: tiene vencimiento. La diferencia es que no tiene la fecha, pero que se vence, se vence", y aseguró "nunca vi en mi vida semejante nivel de bruteza e ignorancia como se escucha a diario".
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Cristina Kirchner estuvo en Corrientes y denunció una persecución judicial en su contra
Cristina Kirchner y un duro discurso contra la Justicia
Frente a toda su militancia Cristina Kirchner manifestó "si estoy acabada, ¿por qué no me dejan competir?. En el fondo, los que tienen miedo son ellos. Solamente la gente que tiene miedo y odio trabaja de esa manera".
En la misma línea sostuvo que podrán meterla presa pero "lo que nunca podrán evitar que vuelva es el pueblo, que tiene una identidad y una historia en la Argentina; hay una clase media que quiere vivir mejor; hay trabajadores que quieren ganar mejores salarios", y agregó "¿Cómo la gente se va a olvidar que necesita medicamentos para los jubilados del PAMI o que tener un hijo discapacitado no puede ser una maldición de Dios? Energúmenos y bestias que le dicen a la gente que el Estado no tiene la culpa".
Por último, recordó sus gestiones en la Presidencia: "Lo que nunca me van a perdonar es que en esos 12 años y medio pudimos lograr los niveles de desempleo más bajos, pero también el nivel de participación de los trabajadores de toda la historia del PBI nacional: más que el 50-50 que siempre tuvo el peronismo", y remarcó la importancia del federalismo: "Todas las veces que los argentinos vivieron bien y tuvieron buenos salarios, no fue por mérito de ningún gobernador, sino por mérito de un proyecto nacional. A ver si se avivan, giles".