Tenía 82 años y dedicó su vida al club Universal de La Plata. Fue jugador, árbitro y directivo. La Copa Universal lleva su nombre desde 2023.
La comunidad del deporte de La Plata despide con profundo pesar a Roberto Di Bastiano, socio vitalicio de la Asociación Cultural y Deportiva Universal, quien falleció el viernes 16 de mayo a los 82 años. Su vínculo con el club comenzó en 1957, cuando tenía apenas 14 años, y desde entonces se convirtió en una figura central de la institución.
A lo largo de su vida fue jugador de básquet, entrenador, árbitro y dirigente. Entre sus múltiples cargos, se desempeñó en el club como secretario desde la década del 70, además de pro-secretario, tesorero, pro-tesorero y vocal. Luego de un período alejado de la vida institucional, regresó en 2019 para sumarse nuevamente a la comisión directiva.
El domingo 7 de mayo de 1939, más de 25 mil personas fueron testigos en el Paseo del Bosque, sin saberlo, del paso por la ciudad de quien sería uno de los máximos ídolos del deporte nacional, cinco veces campeón mundial de Fórmula 1.
El Club Gutenberg de La Plata compitió hace 90 años, al nacer la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y desafiliarse porque lo bajaron de categoría.
Solía decir que Universal era "una de sus dos casas" y su entrega diaria reflejaba ese amor incondicional. En sus palabras, el verdadero objetivo era “formar a la persona, después al deportista y más tarde, tal vez, al dirigente”.
En 2021, expresó su visión sobre la función de un directivo: “No soy dueño de nada. Gracias a una asamblea de socios me aceptaron en una lista, por eso tengo que cuidar el patrimonio. El orgullo mío es haber sido jugador, entrenador, árbitro y que me hayan dado la posibilidad de ser directivo”.
Su legado también se perpetúa en la Copa Universal, que en 2023 fue rebautizada como Copa Roberto Di Bastiano, en honor a su extensa trayectoria en el club. Fue árbitro desde los 16 hasta los 69 años, retirándose recién en 2012.
“¿Para qué venís?” era su clásica pregunta a quienes llegaban a la sede. Con esa frase buscaba promover una inclusión real, donde cada miembro se sintiera parte de una gran familia. “El club es una familia integrada. Acá, los proyectos personales son para Universal y la emoción la tengo todos los días”, afirmaba con emoción.