El cierre del Torneo Apertura podría dejar a Gimnasia en zona de descenso directo si no logra sumar puntos frente a Platense. Con rivales directos en alza, el equipo de Diego Flores necesita un resultado urgente para evitar complicaciones.
Si Gimnasia no suma ante Platense y se da otro resultado en contra, el Lobo podría cerrar el semestre en una situación crítica.
El cierre del Torneo Apertura podría dejar a Gimnasia en zona de descenso directo si no logra sumar puntos frente a Platense. Con rivales directos en alza, el equipo de Diego Flores necesita un resultado urgente para evitar complicaciones.
La pelea por no descender se tornó más dramática que nunca para el Tripero. Luego de quince fechas sin conseguir regularidad y con una racha negativa que ya supera los 2 meses sin victorias, el Lobo llega a la última jornada del semestre al borde del abismo: si Aldosivi gana y Gimnasia no suma, caerá a la zona roja.
Gimnasia cerrará su participación en el Torneo Apertura con la baja de su figura por acumulación de tarjetas amarillas.
En busca de cerrar el torneo con un triunfo, en Gimnasia podría haber un retorno que espera Diego Flores para ser titular.
El partido clave será el domingo a las 15.30, cuando el conjunto albiazul reciba a Platenseal mismo tiempo que Aldosivi visite a San Martín de San Juan. Si el Tiburón se impone ante un equipo ya prácticamente condenado como el sanjuanino y los de Flores no logran ganar, la tabla anual marcará el ingreso del Lobo a puestos de descenso directo.
En la tabla, Atlético Tucumán y Unión ya superaron al Mens Sana tras el triunfo del Decano sobre Independiente. El margen es mínimo y cualquier punto puede ser decisivo. La presión es total para un equipo que no levanta cabeza y cuya continuidad en Primera está en riesgo.
A nivel de promedios, el panorama tampoco es alentador para Gimnasia, que empieza a complicarse de cara a la temporada 2026. Por eso, el duelo con Platense se volvió crucial no solo para evitar caer ahora, sino también para no seguir arrastrando una desventaja que podría ser irreversible a futuro.
El presente del Lobo expone el desgaste del ciclo de Flores, muy cuestionado por los malos resultados. Mientras tanto, los hinchas se aferran a la ilusión de un triunfo que les permita respirar, al menos hasta el arranque del Torneo Clausura.