Gimnasia vuelve a Avellaneda por tercera vez en el año y cuando mira para atrás encuentra un halo de esperanza para regresar a la victoria fuera de casa.
Así como las victorias cambian el foco del equipo, que pasó de una racha negativa pasó a ver el lado positivo de tan solo haber perdido dos partidos en tres meses, Gimnasia ahora se encuentra obligado a elevar la vara e ir por más en el sprint final de un campeonato que tuvo de todo para el Lobo.
Sin embargo, la próxima fecha donde el conjunto de Marcelo Méndez debe visitar a Independiente, tiene varias casualidades y todas ellas son más que positivas para un equipo que no necesita más que buenos augurios en este momento donde todo parece que se le hace cuesta arriba.
El arquero de Gimnasia, Marcos Ledesma, volvió a convertirse en protagonista del equipo y lo llevó a poder volver a sumar de a tres en el campeonato.
En este sentido, el Lobo viajará el próximo jueves nuevamente sin poder repetir equipo debido a una expulsión y otra lesión que lo deja a Méndez reculando para poder parar un nuevo once pero con vueltas como la de Leonardo Morales, pudiendo parar una línea de cinco defensores.
Pero si se trata de salir a defender la camiseta fuera de casa, este año al conjunto Mens Sana le sale una sonrisa en la cara debido a que en las dos ocasiones que le tocó visitar tanto a Independiente como a Racing el resultado fue uno solo: victoria para el Lobo por 1 a 0.
Contra el Rojo fue uno de los primeros partidos del tripero en la Copa de la Liga cuando venció al conjunto local con el gol de Rodrigo Saravia para sentenciar lo que parecía ser un buen comienzo de Gimnasia en el año de la mano de Leonardo Madelón.
Meses más tarde, de la mano de Marcelo Méndez, el conjunto albiazul venció a Racing en condición de visitante por 1 a 0 con gol de Benjamín Domínguez para salir de una racha de cuatro partidos con derrotas, pero sentenciando su poderío en Avellaneda que buscará revalidar la semana próxima cuando vuelva al Libertadores de América.