Federico Díaz Cano, hincha de Gimnasia que cayó 15 metros desde una tribuna del Estadio Juan Carmelo Zerillo en la previa del clásico, tiene signos de mejoría.
La comunidad de Gimnasia continúa conmocionada por el grave accidente que sufrió Federico Díaz Cano, el hincha que cayó 15 metros desde la Tribuna Centenario del Estadio Juan Carmelo Zerillo instantes antes de que comenzara el clásico platense ante Estudiantes. Tras 2 días de internación, el joven permanece estable, sedado y bajo observación permanente, con signos de mejoría.
La víctima fue internada de urgencia en el Hospital San Martín, al que llegó consciente pero con múltiples lesiones de gravedad. Los profesionales confirmaron fracturas expuestas en miembros superiores y un severo traumatismo encéfalo-craneano, además de otras lesiones internas producto del impacto.
Gimnasia oficializó al nuevo director deportivo y abrió negociaciones clave con Fernando Zaniratto y la dirigencia para definir continuidad y refuerzos.
Este miércoles se hará una colecta de sangre en el Estadio Juan Carmelo Zerillo, en una acción solidaria organizada por Gimnasia y entidades de salud.
En aquellas primeras horas Federico debió ser operado, recibir transfusiones de sangre y ser asistido con respirador debido a la magnitud de su cuadro. A casi 2 días del accidente, sin embargo, pudo ser trasladado al Instituto del Diagnóstico y comenzó a mostrar señales de mejoría.
En ese marco, fuentes médicas revelaron que las últimas 12 horas fueron "buenas", en particular por la ausencia de pérdidas de sangre activas luego de dos transfusiones. Las fracturas en sus brazos ya fueron operadas y los estudios descartaron complicaciones en pulmones o riñones, un dato alentador en medio de la gravedad del panorama.
La familia de Federico le contó en la noche del martes el resultado del clásico y se "enojó", una reacción que fue interpretada como muestra de lucidez
El entorno familiar confirmó que actualmente se encuentra "estable, sedado y bajo observación permanente". En medio de la tensión, un episodio anecdótico dio un respiro a sus allegados: en la noche del martes le informaron el resultado del clásico y, pese al dolor por la derrota albiazul, se "enojó", una reacción que interpretaron como una muestra de lucidez y fortaleza.
El impacto emocional del accidente derivó en una rápida movilización de hinchas y vecinos. En el entorno de Díaz Cano se lanzó un pedido de contención colectiva y se convocó a realizar una cadena de oración por su recuperación. La iniciativa, difundida mediante un flyer en las redes sociales, describe al joven como "buen pibe, buen padre y buen hijo" e invita a sumar apoyo espiritual "sin distinción de creencias".
El llamado se viralizó con fuerza dentro de la comunidad tripera, que continúa pendiente de cada parte médico y expresa un acompañamiento masivo a la familia. Al mismo tiempo, el hecho reactivó reclamos vinculados a la seguridad en los estadios y a la necesidad de revisar protocolos para evitar tragedias similares en el futuro.
El dramático incidente ocurrió a pocas horas del inicio del derby en el Bosque y requirió una intervención inmediata del personal de emergencia presente en el estadio. Ahora, el pronóstico de Federico dependerá de su evolución en los próximos días, claves para evaluar secuelas, estabilidad neurológica y la posibilidad de iniciar un proceso de rehabilitación.