La Casa Rosada intenta destrabar el debate sobre las SAD en medio de tensiones con la AFA y un escenario político complejo.
El futuro del fútbol argentino vuelve a ser eje de discusión. Desde Casa Rosada buscan reactivar las negociaciones con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) para implementar las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD), una medida que instaló un férreo debate en el mundo futbolero.
El objetivo del Gobierno es lograr una modificación del estatuto de AFA antes de mayo, pero las tensiones y diferencias de criterio entre las partes parecen ser un obstáculo difícil de superar. Desde Balcarce 50 aseguran que el diálogo con el entorno de Claudio "Chiqui" Tapia, presidente de AFA, continúa vigente.
El presidente de Estudiantes no se quedó callado tras los dichos de Pablo Toviggino en nombre de la AFA. Esta fue la respuesta de Juan Sebastián Verón.
"Nosotros ya movimos, ahora estamos esperando la respuesta", expresaron desde el Ejecutivo, en referencia a los cuatro nuevos lineamientos que se presentaron como propuesta. Las negociaciones están lideradas por el equipo de la diputada de La Libertad Avanza, Juliana Santillán, con contacto directo con el asesor presidencial Santiago Caputo.
Sin embargo, la relación se tensó en las últimas semanas tras las declaraciones del tesorero de AFA, Pablo Toviggino, quien criticó duramente a Juan Sebastián Verón, presidente de Estudiantes, por el avance en el acuerdo con Foster Gillett y sus primeros movimientos en el mercado de pases.
"Resultaría conveniente, incluso aconsejable, que expliques claramente a los socios del club que presides desde Miami, que lo único que estás haciendo es contraer una deuda monstruosa", disparó Toviggino en X, en alusión al acuerdo entre Verón y el inversor estadounidense, aún no oficializado.
Por su parte, en la Casa Rosada cuestionaron el tono de las publicaciones del dirigente: "No entendemos por qué escribe de esa forma en las redes si estamos teniendo buen diálogo", señalaron fuentes del oficialismo.
A su vez, a Todo Noticias le reconocieron la complejidad del escenario: "No tiene sentido ir a fondo si podemos llegar a un acuerdo", le afirmó un funcionario en relación a la posibilidad de sanciones de FIFA o conflictos con jugadores de la Selección Argentina, cuya figura más importante, Lionel Messi, respalda a Tapia.
El conflicto tiene raíces profundas. En 2023, el Gobierno impulsó mediante el DNU 70/2023 la incorporación de las SAD a través de modificaciones a la Ley de Deporte y Actividad Física (20.655). Sin embargo, la medida fue bloqueada por una cautelar del Juzgado Federal de Mercedes tras un pedido de AFA, que considera la iniciativa como una amenaza directa al modelo tradicional de los clubes argentinos.
La negociación, además, suma un componente político: figuras como Daniel Scioli, secretario de Turismo y Deportes, y Karina Milei, secretaria general de la Presidencia, han jugado roles periféricos, mientras que encuentros como el de la sede de la Conmebol en Paraguay intentan bajar tensiones. Allí, la representación del Ejecutivo y AFA coincidió en la oficialización de las sedes para la Copa del Mundo.