El Consejo Profesional de Química de la Provincia de Buenos Aires se pronunció tras la explosión ocurrida durante una feria de ciencias en una colegio del partido de Pergamino, donde una alumna de 10 años resultó gravemente herida y una docente perdió un ojo.
En su comunicado, la entidad reclamó el estricto cumplimiento de la Ley 7020, la normativa provincial regula el ejercicio de la química y exige que los procesos con sustancias sean realizados únicamente por personal idóneo y matriculado. Sostuvo que esa medida busca evitar accidentes y garantizar la seguridad en el manejo de materiales reactivos.
El impactante accidente ocurrió el jueves pasado en el Instituto Comercial Rancagua, durante una demostración escolar en la que explotó un “volcán” artificial. Según testigos, en su interior se habrían colocado “azufre picado, carbón picado y una sal especial”, mezcla que generó la detonación.
Explosión en la feria de ciencias de Pergamino
Los argumentos del Consejo Profesional de Química
Desde el Consejo indicaron que “sucesos como el acontecido constituyen una constante en todo el territorio provincial y encuentran su denominador común en el manejo indebido o negligente de las sustancias químicas”.
Ante la gravedad del episodio, el organismo convocó a docentes y personal técnico que trabajen en establecimientos educativos o productivos a regularizar su situación profesional. “Llamamos a acercarse al Consejo Profesional de Química de la Provincia de Buenos Aires para jerarquizar su ejercicio mediante la matriculación obligatoria”, expresaron.
También destacaron la importancia de acceder a instancias de capacitación y asesoramiento permanente para prevenir nuevos hechos similares. “La formación continua y la responsabilidad profesional son las herramientas fundamentales para garantizar la seguridad en la manipulación de productos químicos”, señalaron.
Escuela de roncagua explosion
La explosión ocurrió en el Instituto Comercial de Rancagua, en el partido de Pergamino
El Consejo subrayó que los laboratorios y talleres que manipulan sustancias deben contar con profesionales inscriptos y supervisión técnica adecuada, conforme a la legislación vigente. De esa manera, remarcaron, se protegen tanto a los estudiantes como a los trabajadores involucrados en actividades prácticas.
Por último, reiteraron que la tragedia de Pergamino debe servir como punto de inflexión para reforzar los controles. “Es necesario que los establecimientos educativos, públicos y privados, se ajusten a las normas y garanticen que las prácticas químicas sean dirigidas por personal habilitado”, concluyó el comunicado.