Un partido de la liga Lifipa de La Plata terminó en violencia tras insultos, golpes y la intervención de padres, con chicos de 13 años en medio del caos.
Un partido de fútbol infantil disputado en La Plata terminó en un grave episodio de violencia, con golpes, insultos y momentos de tensión que involucraron a jugadores de 13 años, padres y entrenadores, según denunciaron familias que presenciaban el encuentro.
El hecho ocurrió el lunes al mediodía durante un encuentro de la liga Lifipa entre El Triunfo Granate y Deportivo Académico, que se disputaba en la cancha del club local, ubicada en calle 5 y 645, en la localidad de Arana.
Tras los graves disturbios del lunes en el Estadio del Bosque, la Justicia resolvió dejar en libertad a los hinchas de Gimnasia que habían quedado detenidos.
Tras el triunfo 1 a 0 de Estudiantes, hinchas y fieles de la Iglesia Estallar de Salvación se cruzaron en 7 y 50; hubo empujones y la congregación se retiró.
De acuerdo a los testimonios recabados, el partido se desarrollaba con normalidad hasta el inicio del segundo tiempo, cuando el árbitro decidió suspenderlo momentáneamente a raíz de insultos y agresiones verbales que provenían del sector donde se encontraban padres y cuerpo técnico del equipo rival.
Pese a la tensión, el partido se reanudó brevemente para que los chicos que aún no habían ingresado pudieran despedirse del fútbol infantil en cancha de siete, ya que varios disputaban su último encuentro en esa categoría.
La situación se descontroló tras el pitazo final. Según relataron familiares, un jugador de El Triunfo Granate fue empujado y golpeado por un rival mientras se ataba los cordones. Al intentar defenderlo, otro compañero también fue atacado y rápidamente se generó una pelea entre varios jugadores.
Las familias denunciaron que adultos ingresaron al campo de juego y golpearon a los chicos, y que incluso uno de los agresores habría exhibido un arma blanca. "Nos siguieron hasta el auto con insultos y queriendo golpear a los nenes. Uno tenía un cuchillo y tuvimos que evacuar el lugar", contó una madre, quien aseguró haber sido golpeada por un entrenador mientras protegía a su hijo.
Tras los violentos incidentes, las familias agredidas se retiraron del predio y esperan que la organización de la liga y las autoridades correspondientes tomen medidas y apliquen sanciones por lo ocurrido.