Una pareja de Gonnet fue víctima de un robo millonario tras dejar su casa por siete horas. Les sustrajeron U$S8.000 y distintas joyas.
La inseguridad volvió a golpear con fuerza en Gonnet, donde una pareja sufrió un robo millonario tras ausentarse de su casa durante siete horas. Los delincuentes forzaron una puerta balcón, recorrieron todas las habitaciones y se llevaron U$S8.000 junto con joyas, en un hecho que acrecienta el temor vecinal.
La ola de inseguridad en La Plata suma un nuevo capítulo en Gonnet, donde una pareja fue víctima de un robo millonario tras salir de su vivienda ubicada en calle 24 entre 499 y 500. El hecho ocurrió entre las 11.30 y las 18.30 del último sábado, lapso que resultó suficiente para que delincuentes desvalijaran la casa.
Un peluquero de Lisandro Olmos contó que delincuentes forzaron la puerta de su casa y se llevaron electrodomésticos, ropa y herramientas de trabajo.
Un repartidor fue sorprendido por dos motochorros en La Plata, se defendió a las piñas y los ladrones le dispararon con una pistola de aire comprimido.
Al regresar, las víctimas descubrieron que el portón corredizo no respondía al control remoto. Al acercarse, notaron que estaba abierto y se encontraron con un panorama desolador: los ladrones habían ingresado tras forzar la puerta balcón que conecta con el patio trasero.
Los intrusos revisaron con detenimiento todas las dependencias de la vivienda: tres dormitorios y un baño en la planta alta, además de la cocina, el lavadero, el living, el comedor y otro baño en la planta baja. Se llevaron U$S8.000, joyas y alhajas, aunque no se precisaron cantidades exactas. En cambio, no tocaron electrodomésticos ni el quincho.
De acuerdo a las primeras investigaciones, el robo habría sido cometido por al menos dos personas vestidas con ropa deportiva oscura. La justicia busca determinar si se trató de un hecho al azar o si los delincuentes actuaron con información precisa sobre la ausencia de los propietarios.
El caso de Gonnet se suma a una serie de episodios delictivos que generan alarma en distintos barrios de la ciudad. Los vecinos señalan que, pese a las medidas de seguridad como rejas, cámaras, alarmas o grupos de WhatsApp, los robos continúan y alimentan una sensación de desprotección generalizada.
La falta de respuestas inmediatas por parte de las comisarías, la lentitud judicial y la saturación del sistema penitenciario profundizan el temor. En La Plata, las entraderas, arrebatos y asaltos se repiten a diario, mientras las asambleas vecinales crecen para reclamar soluciones frente a un flagelo que atraviesa a todas las clases sociales y edades.