Dos sospechosos fueron atrapados tras cometer tres robos en Berisso. Hubo persecución, tiros y uno de los detenidos terminó herido.
Dos jóvenes fueron detenidos durante la mañana del sábado en Berisso, luego de protagonizar una seguidilla de robos a mano armada. El raid delictivo arrancó a la madrugada, pero el operativo terminó cerca del mediodía con la captura de ambos implicados, después de una persecución en la que hubo tiros y uno de los jóvenes resultó herido.
Según informaron desde la Secretaría de Seguridad, a la mañana robaron en una casa, donde forzaron el portón y se llevaron una moto Mondial Max 100 cc. Minutos después, ya con el rodado, asaltaron a una joven de 23 años en la vía pública, sustrayéndole una riñonera y un celular tras amenazarla con un arma.
El incendio de vehículos se ha convertido en moneda corriente en Berisso y las autoridades trabajan para determinar por qué suceden.
Un presunto hecho de inseguridad desató una brutal golpiza, cuando frentistas de Berisso decidieron hacer "justicia por mano propia" y atacaron a un chico.
Más tarde, repitieron la modalidad, e interceptaron a un transeúnte y le robaron las zapatillas y el teléfono celular. Tras una alerta radial, la policía desplegó un operativo cerrojo y logró interceptarlos cerca del CIC del barrio obrero. Uno de ellos apuntó a los efectivos con un arma y fue herido en el hombro por la policía antes de ser reducido.
Ambos tienen antecedentes penales, y uno de ellos es menor de edad. Fueron puestos a disposición de la Justicia, y la causa fue caratulada como "Robos reiterados y lesiones", y quedó a cargo de la Fiscalía Penal Juvenil correspondiente, que dispuso el secuestro del vehículo y la preservación del lugar para realizar las pericias.
El raid delictivo comenzó a las 7:30 de la mañana en una vivienda ubicada en 167 entre 30 y 31, donde los sospechosos forzaron el portón de acceso y una cadena para sustraer una motocicleta Mondial Max 100 cc. Este vehículo fue clave para la movilidad durante los robos que siguieron inmediatamente después.
Minutos más tarde, en 11 y 152, interceptaron a una joven de 23 años y, tras amenazarla con un arma de fuego, le robaron una riñonera y un celular. Poco después, en la intersección de 30 y 167, abordaron a otro peatón y repitieron la misma modalidad: intimidación con arma de fuego y robo de sus zapatillas y teléfono móvil. Todo ocurrió en un lapso de pocas horas, lo que activó un rápido despliegue policial.