Familiares de Agustina Casco, la joven de 21 años que era oficial del Comando de Patrullas de Ituzaingó y realizaba el curso de ingreso de subayudante del Área Pereyra en la escuela Juan Vucetich de La Plata denuncian negligencia por parte de la institución, tras su muerte luego de una práctica en la que recibió un golpe.
Concretamente, sostienen que Casco recibió un fuerte golpe durante una práctica de esposamiento y que "sólo le dieron un vaso de agua y esperaron que se repusiera”. La acusación fue realizada por Jessica, la hermana de la joven, ante el canal Todo Noticias. “Si le hubieran dado la asistencia médica que correspondía, no estaría ahora en un cajón”, lamentó.
"Fue negligencia de la Escuela, de los instructores. Se había desmayado varias veces ya" agregó Jessica Casco, quien además sostuvo que su hermana ya había mencionado que en la Escuela Vucetich había "maltratos y mala alimentación". En una de las últimas conversaciones que mantuvo con Agustina, luego de la polémica práctica, Jessica le pidió que fuera al médico y recibió como respuesta dos imágenes que evidenciaban los hematomas en su cuerpo.
Además, agregó: "Cuando la vi entrar estaba pálida y llena de moretones: en la cara, en el pecho, en la panza". Un día después, Agustina debió ser internada como consecuencia de los fuertes dolores abdominales que persistían y fue diagnosticada con un cuadro de "abdomen agudo, anemia aguda y líquido alojado en la cavidad abdominal”.
A pesar de que se le realizó una cirugía a abdomen abierto en una clínica de Merlo, no pudieron salvarle la vida. Respecto de esa cirugía la hermana de la joven fallecida manifestó: “Cuando la intervinieron por la hemorragia interna, descubrieron que tenía un quiste en un ovario”.
Por otro lado, el abogado representante de la familia de Agustina, Rodrigo Tripolone, aseguró que lo ocurrido con la joven fue un “homicidio culposo” y que deben intervenir en la investigación las fuerzas federales: “El caso no puede ser investigado por la policía bonaerense, no pueden investigarse a ellos mismos”, subrayó.
La fiscal Marisa Monti, de la Fiscalía Nº 5 de Morón, lleva adelante la investigación y espera recibir el material médico para determinar los pasos a seguir y volver a tomarle declaración a la mamá de la joven, quien insiste en que no se trató de algo accidental, sino de una negligencia. Además, se investigará si hubo alguna situación abusiva dentro del predio de capacitación donde asistía Agustina.