La Plata continúa conmocionada por el asesinato a sangre fría de dos mujeres en Arturo Seguí, hecho por el cual fue detenido el policía Nazareno Miño como único acusad. Las víctima son su expareja y su excuñada a quienes según indican todos los elementos recabados por los investigadores, el hombre les disparó a quemarropa. También baleó al novio de su excuñada quien por estas horas pelea por su vida en el un hospital. Todo ocurrió frente a los ojos de los hijos de ambos, de 10 y 7 años, a quienes se llevó del lugar para luego dárselos a un familiar antes de entregarse en el destacamento policial del lugar.
Fuentes policiales indicaron a 0221.com.ar que todo se dio el martes a la noche, en medio de una fuerte discusión entre Miño y Victoria Díaz, con quien había estado en pareja y tenían dos hijos. Habría sido en medio del fuerte cruce que el efectivo sacó una pistola 9 mm y le disparó a su ex, luego a Castorina Díaz (hermana de Victoria) quien salió a defenderla, y finalmente a la pareja de esta última, Martín Alcides Lezcano.
A partir del relato de Élida Díaz, la hermana mayor de las víctimas del femicidio, a este medio, se supo que el desencuentro entre el asesino y su expareja se debió a que Díaz planeaba mudarse con los nenes junto a una nueva pareja. La discusión fue subiendo de tono hasta el agente desató el brutal ataque y asesinó a las dos mujeres en el lugar e hirió gravemente al otro hombre. Este último fue trasladado de urgencia al Hospital San Roque de Gonnet, donde se encuentra internado con asistencia respiratoria y en un estado crítico de salud.
Con los homicidios consumados, el agresor tomó en tanto a sus dos pequeños hijos, de 7 y 10 años, y se dirigió al Destacamento de Arturo Seguí, ubicado a pocas cuadras del lugar, donde dejó a los nenes, se entregó y confesó los brutales femicidios.
"ERA AGRESIVO Y LO HABÍA DENUNCIADO"
Élida reveló a este medio que cuando todavía salían Miño la golpeaba y ella incluso había llegado a denunciarlo, lo que daba cuenta de que la relación era mala. Fuentes policiales confirmaron a este medio la existencia de una denuncia penal contra el confeso femicida, de enero de 2023; y revelaron además que también existían diversos antecedentes en el Fuero Civil, con varias presentaciones ante juzgados de Familia en la ciudad.
En ese punto, Yenifer Díaz, una amiga de la joven asesinada contó a 0221.com.ar que mientras la pareja todavía salía vivían en Capital Federal junto a sus dos hijos. Tras la separación, en tanto, Castorina trajo a su hermana a vivir con ella para cuidarlos porque Miño "no los dejaba en paz". Entonces comenzaron los conflictos en torno a los hijos que tenían en común. "Él tenía un régimen de visitas pero no venía", contó la mujer y agregó que "ella se los llevaba". "En uno de esos momentos, discutieron y él le apuntó con el arma, por eso ella tenía miedo de llevarle a los chicos y no se los llevó más. Entonces se ve que el tipo se enojó", sostuvo al respecto del ataque.
En medio de la conmoción por los brutales crímenes, Miño se fue del lugar llevándose consigo a los dos nenes y, poco después, se entregó en el destacamento de Arturo Seguí ubicado a pocas cuadras del lugar del hecho. De acuerdo con los informes policiales a los que accedió este medio, el hijo de 7 años y la hija de 10 de Victoria fueron "puestos a resguardo tras lo sucedido.
"El juez le había dado la custodia a mi hermana y él quería tenerlos, siempre me lo dijo a mí, y como no lo consiguió, vino y la mató", sostuvo Élida al respecto y sentenció: "Voy a luchar por tenerlos. Ya me quitó a mis dos hermanas y no me van a quitar a mis dos sobrinos".
Mientras tanto, la investigación sobre el caso avanza a cargo de la fiscal Ana María Medina, de UFI N° 14, con acusaciones de "doble homicidio (en el marco de femicidio)" y "homicidio en grado de tentativa" para el agente que se desempeñaba en el área de Dirección de Control Tecnológico del Ministerio de Seguridad y fue desafectado de la Policía Bonaerense por el hecho.
