La violencia no cede y en las últimas horas una mujer de La Plata se convirtió en víctima de un brutal arranque de furia que involucró gritos, insultos y varios golpes con un palo de golf, en un circuito ubicado en la ciudad balnearia de Pinamar.
Una mujer de La Plata, pero domiciliada en Pinamar; fue atacada por una mujer y su esposo. Recibió varios golpes con un palo de golf y se salvó de milagro.
La violencia no cede y en las últimas horas una mujer de La Plata se convirtió en víctima de un brutal arranque de furia que involucró gritos, insultos y varios golpes con un palo de golf, en un circuito ubicado en la ciudad balnearia de Pinamar.
Los instantes posteriores a la salvaje secuencia fueron registrados por un testigo en el lugar. El hombre advirtió lo que estaba pasando y de inmediato tomó su teléfono para registrar todo lo que estaba pasando.
Gritos, piñas, patadas y tensión fue el saldo de un inexplicable ataque en La Plata que casi termina con dos hombres linchados en plena diagonal 80.
Ocurrió en la esquina de 7 y 43. El acusado escapó en moto pero fue detenido tras un operativo cerrojo. Terminó en la comisaría Segunda de La Plata.
En uno de los dos videos a los que tuvo acceso 0221.com.ar puede verse a la víctima seriamente herida, tendida en el suelo y mientras intenta incorporarse con gran dificultad debido al dolor que sufre.
Según pudo saber este medio, tras la paliza, la mujer debió asistir a un hospital de la zona para ser atendida. Afortunadamente los médicos determinaron que su estado de salud es bueno pese a las lesiones sufridas y confirmaron que se encuentra fuera de peligro.
La propia víctima, de 61 años, le contó a 0221.com.ar que una mujer y su esposo la atacaron sin previo aviso, mientras se encontraba disfrutando del espacio.
De acuerdo con el relato, todo sucedió alrededor de las 17 del pasado martes y comenzó cuando la agresora se lanzó sobre ella en un arranque de furia. "Me golpeó en repetidas ocasiones con dos palos de golf", contó la mujer y explicó además que a raíz de la paliza sufrió múltiples contusiones en la cabeza y un intenso dolor corporal.
Aunque todavía se investiga cómo y por qué sucedieron los hechos. La denunciante y otros testigos indicaron que el ataque habría tenido tintes racistas. "Esto no es Ostende, vayan al conurbano a tomar mate negras ratas", habría vociferado la violenta pareja antes de agregar: "Pagamos 50 mil dólares por estar acá".