Un terrible caso sacude a La Plata y es que un abogado fue condenado por masturbarse delante de su pequeño hijo de 6 años. El hombre ya cuenta en su haber con una condena por “corrupción de menores doblemente agravada” a la pena de 10 años de cárcel.
Según informaron fuentes oficiales, a criterio del juez que intervino en el proceso, Claudio Bernard, del Tribunal Oral en lo Criminal II de nuestra ciudad, “sobraron elementos” de cargo para formar su convicción de que D. R. M, con grado de certeza, participó en el hecho indicado en carácter de autor.
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“Me estaba duchando, todo enjabonado y mi hijo entró de manera sorpresiva al baño”, fue el argumento utilizado por el ahora condenado, al tratar de defenderse de una de las denuncias. El veredicto refirió a “tocamientos impropios y actos de masturbación” delante de la víctima, de 6 años. También de “maltratos y amenazas”, que conformaron una situación que al chico le provocaron “graves daños psicológicos”.
“Con la prueba producida y la incorporada por su lectura al debate doy por legalmente acreditado que en el domicilio de (...) Ringuelet, partido de La Plata, un sujeto de sexo masculino promovió la corrupción sexual de su hijo, cuando este tenía alrededor de seis años de edad. El imputado con la finalidad de corromper y desviar el normal desarrollo sexual del niño, le exhibía sus genitales, al mismo tiempo que realizaba actividades de índole sexual, no acordes a la edad y madurez sexual del niño, masturbándose en su presencia además de aplicarle patadas en sus piernas con el fin de que no tomara clases de baile transmitiéndole como paradigma que la realización de dichas actividades no son propias del género masculino”, mencionó el magistrado en su fallo.
Según surge de la lectura de la resolución, esos golpes en las piernas buscaban que la víctima cambiara de actividad. Que dejara las danzas, que “es de mariquitas”, por el fútbol, que sí “es de hombres”, se agregó. En base al razonamiento de Bernard, el acusado “maltrató, golpeó y humilló” a otro de sus hijos, pero la maniobra delictiva enrostrada a su padre, estuvo exclusivamente dirigida a la víctima.
Cabe destacar que por lo expuesto anteriormente, se emitió un fallo condenatorio, de 10 años de cárcel, más accesorias legales y costas, aunque por el momento, como el acusado siempre estuvo a derecho, habrá que esperar qué define la instancia de alzada para que, eventualmente, con un doble delito conforme, pudiera ordenarse su detención.