Los vecinos de la zona de Ruta 11 y 609 amanecieron con la triste noticia del fallecimiento de una joven y su hija, tras ser atropelladas por un Toyota Corolla conducido por un hombre de 44 años. De inmediato, muchos de ellos comenzaron a movilizarse hacia la zona del accidente y a reclamar por más alumbrado público y semáforos, un pedido que no es nuevo.
"Está muy oscuro a esa hora, por eso venían a tomar el micro aquí a la esquina, cruzaban la calle e iban a la garita", informó Elizabeth, vecina de la zona, en referencia a la falta de luz que suele haber a esta altura del año, a las 7 de la mañana, hora en que ocurrió el accidente. “Siempre pedíamos iluminación y semáforo. Hace diez años hubo un accidente acá y una nena todavía sigue en rehabilitación. No hay ni una luz. Nos vamos a quedar acá hasta que pongan semáforo e iluminación", agregó la vecina.
Los vecinos reunidos en el lugar decidieron entonces realizar una manifestación para hacer sentir su reclamo. "Sin luz, sin semáforo, no se ve nada y los autos y micros que pasan volando, esto es una boca de lobo", manifestaron.
El hecho ocurrió a primeras horas del día, cuando la joven de 35 años identificada como Cristina Figueroa, de 27 años, y su hija Wendy Aylén Gramajo, de 7, fueron embestidas por un Toyota Corolla que iba a gran velocidad y perdieron la vida. Cuando llegó la ambulancia del SAME, los paramédicos no pudieron hacer nada para salvarlas. “La mamá falleció mirando a su hija que murió en el acto", afirmaron los vecinos.
Los investigadores trabajan ahora en reconstruir cómo fueron los hechos. El vehículo fue incautado y el conductor quedó imputado en el marco de una causa caratulada como "doble homicidio culposo".