El joven de 16 años detenido por el crimen de su hermanastra, ocurrido el martes 7 de junio en el barrio La Loma, fue beneficiado con la prisión domiciliaria mientras avanza la investigación. La fiscal Carmen Ibarra entiende que no hay peligros procesales y destacó la actitud del menor y de su familia de estar a derecho para colaborar con la Justicia.
El pedido de prisión domiciliaria fue presentado por la defensa del adolescente, a cargo de Julio Beley y Bruno Strassera. Según pudo saber 0221.com.ar, por el momento se mantiene la calificación de "homicidio simple" y, en las próximas horas, se esperan los resultados de todas las medidas probatorias pendientes.
La defensa hizo estas solicitudes para acreditar que se trató de un caso de defensa personal propia y de terceros. Es decir, que el chico actuó en defensa de la madre y de su hermana, quienes estaban siendo agredidas por la fallecida Sabrina Carusotti.
Por su parte, las autoridades judiciales determinaron que el adolescente no regresará a la escena del crimen y se confirmó que irá a un domicilio alternativo de La Plata para llevar adelante la reconstrucción del hecho.
EL CASO
Tal como informó este portal, todo ocurrió el pasado 7 de junio en 43 entre 25 y 26. Según las primeras informaciones aportadas por fuentes policiales, el sangriento hecho se produjo en la casa de la madre de la víctima, cuando esta le fue a reclamar dinero. En medio de una discusión que derivó en una pelea, el chico de 16 años habría salido en defensa de su madre y atacado a su hermana con un cuchillo de cocina causándole las heridas que resultaron mortales.
Una de las primeras hipótesis indica que la víctima tendría problemas de adicciones y que por ello le reclamaba a su madre dinero. Esa misma versión marca que el adolescente intervino para intentar apaciguar los ánimos, cosa que no logró. Por el contrario, la discusión se tornó más álgida y terminó con el menor tomando un cuchillo y cargando contra la mujer.
Una vez alertada, la Policía llegó al lugar y una ambulancia trasladó a la víctima al hospital San Juan de Dios. Un reguero de sangre quedó en la vereda de la casa como vestigio de la gravedad de las lesiones. Fueron dos heridas profundas que terminaron causando su muerte.

El pasado 9 de junio, el chico de 16 años declaró ante la fiscal del fuero de Responsabilidad Penal Juvenil de La Plata ante quien dio su versión de caso, respondió preguntas y sostuvo que actuó en defensa de su madre y su hermana porque estaban siendo brutalmente golpeadas por Carusotti. "Yo no la quería matar, no quería que termine así", manifestó.
Según declaró, el joven estaba en su habitación y comenzó a escuchar gritos. Enseguida ingresó su sobrino (hijo de la víctima) y le dijo "vení, baja rápido que mi mamá le está pegando a la abuela, la quiere matar". De inmediato, el acusado llamó por teléfono a su padre, le contó lo que estaba sucediendo y el padre llamó al 911.
Siempre según su propio testimonio, el joven salió de su habitación y vio a su hermana en pleno ataque de golpes furiosos contra su madre para luego abalanzarse sobre su otra hermana a la que estaba asfixiando contra el piso, mientras intentaba sacar algo de la cartera. El acusado aclaró que en varias ocasiones vio a la agresora con armas blancas en su cartera.

En ese instante tomó un cuchillo de la cocina. "Estaba asustado, era todo un griterío", señaló. "Pensé que iba a matar a mi hermana" y se abalanzó sobre la agresora. "Ella siempre fue violenta, una vez me quiso ahogar en la pileta", aseveró ante la fiscal. "Yo no la quería matar, no quería que termine así", expresó al borde del llanto.
"Le ha puesto el cuchillo a mi hermana en el cuello pidiéndole plata. En un momento yo estaba temblando, estaba asustado, la iban a matar a mi hermana, no sabía qué hacer. Le dije que la suelte y la apuñalo", dijo el joven antes de romper en llanto, según se desprende de la investigación en curso.

"Escuchaba los gritos, todo, me dolía el pecho. No quería matarla, quería que se separe. Hoy me acuerdo de los gritos, me duele el pecho. No quería que termine así. Si no intervenía terminaba todo peor. Quería que se vaya y que no cause más problema. No quería que termine así. Es cuando me separe y se fue a la calle", detalló el joven en un marco de angustia y otra vez al borde del llanto.