El presidente de Gimnasia y Esgrima La Plata, Gabriel Pellegrino, habló un día después de la brutal represión policial que sufrieron los hinchas triperos en las inmediaciones del Juan Carmelo Zerillo. En ese marco, el mandatario apuntó contra el accionar de los encargados del operativo de seguridad y aseguró que él no dio la orden de cerrar las puertas del estadio, cuando estaba por empezar el duelo del Lobo ante Boca.
“El jefe del operativo decide cerrar la puertas y dejar a la gente afuera de la cancha. En ese momento adentro todavía había lugar, por ejemplo en las plateas”, señaló Pellegrino. En ese sentido, indicó que en el momento que tomaron esa decisión “dejaron afuera gente que tenía lugar asignado, todos veíamos que todavía había un montón de lugares vacíos”.
A su vez, el titular de la CD mens sana que quiere saber por qué los organismos de seguridad tomaron esa decisión que pudo haber provocado una tragedia más grande. “Lo que queremos preguntar es por qué tomaron la decisión de no abrir las puertas. No sé quién es el especialista que dio esa orden, porque pudo ser un Cromañón”, cuestionó en diálogo con CieloSports, al tiempo que agregó: “Que se dejen de joder, que digan quién fue el que se equivocó, que lo saquen de su lugar y pongan a otro”.
Asimismo, contó que durante lo poco que se disputó el partido “había gente que faltaba que nos mandaba mensajes y nos decía que tenían su lugar, pero que no los dejaban entrar y encima les estaban pegando”. “La orden de no abrir las puertas fue de la policía”, subrayó.

Momentos de gran tensión se vivieron en las afueras del estadio del Bosque, en el marco del partido entre Gimnasia y Boca, debido a serios enfrentamientos entre hinchas y efectivos de la Policía Bonaerense. Como consecuencia, el encuentro se detuvo a los 9 minutos del primer tiempo y un hincha del Lobo falleció de una insuficiencia cardíaca.
Según trascendió, los incidentes se habrían generado luego de que el personal afectado a la Seguridad intentara cerrar las puertas de un estadio ya colmado. Testigos aseguran que un efectivo habría empujado a una nena, lo cual desató la furia de los hinchas.

A raíz de esta situación, los uniformados reprimieron con balas de goma y gases lacrimógenos. Tal fue la magnitud que el humo terminó ingresando al campo de juego, por lo que el árbitro Hernán Mastrángelo debió suspender el partido.
En medio de los serios incidentes se confirmó el fallecimiento de un hincha Tripero que habría sufrido una descompensación. El hombre, identificado como César Gustavo Regueiro, fue derivado de urgencia al hospital San Martín en una ambulancia, pero falleció en el móvil antes de llegar.
"Lolo", como se lo conocía, fue un muy querido exjugador de Villa San Carlos y de la Liga Amateur Platense. Era militante peronista, empleado municipal y vivía en la localidad de Tolosa.