El 17 de julio de 2014 todo empezó con una discusión entre LDD (cuyo nombre completo se mantiene en reserva para proteger la identidad de la nena) y su entonces pareja, M; y aunque no era la primera vez que la violentaba, el ruido de golpes de aquella noche sobresaltó a la beba que tenían en común y terminó llevándose la peor parte. La pequeña tenía poco más de un año y medio y sobrevivió de milagro a una madrugada de terror.
Durante casi 4 horas la casa de la calle 802 al 2800 fue escenario de un calvario que llegó a su punto culmine cuando LDD tomó a su hija por los tobillos y la sumergió de cabeza en un lavarropas cargado con agua. El aberrante caso volvió a salir a la luz ahora, tras la condena del acusado a 16 años y seis meses de prisión por intento de homicidio.
"No tengo idea cómo se lastimó", dijo inalterable LDD cuando la policía llegó a su hogar lo despertó preguntándole que había sucedido con su hija. Lo verdad era, sin embargo, muy diferente: su llanto, a raíz de la golpiza que le estaba dando a su mamá, lo había enfurecido y en un arranque de violencia estuvo a punto a de ahogarla.
"Esta pendeja de mierda llora todo el día, me tiene podrido, si en una semana no la calmás, te la saco afuera y ahora no quiero que duerma en mi cama. Se va a cagar de frío, que duerma en una almohada en el piso" (SIC), gritó el hombre según consta en la causa. M obedeció con la esperanza de que él también se calmara y acostara, pero eso no sucedió y empezó a pegarle a la pequeña. La mujer se la sacó de los brazos y corrió a encerrarse en una habitación, pero él abrió la puerta de una patada y comenzó golpearla con un palo. Con M sangrando y llorando, LDD se enfocó en la beba, la tomó de los pies y la metió en el tambor del labarropas varias veces con el fin de ahogarla. En un rapto de desesperación, la mujer sin embargo logró rescatarla.
"Él había tomado pastillas, Rivotril, porque consumió cocaína. Yo trato de tranquilizar a la nena porque la mojó adentro del lavarropas. La puse en mis brazos mirándome y siento de atrás una piña que le da en la sien a la nena. Y empezamos a discutir de nuevo", contó M en una entrevista con el canal de noticias A24. Ante la Justicia su relato fue todavía más estremecedor: "Le decía que no le pegue más a la nena porque la iba a terminar matando", contó y agregó que "eso era lo que él quería, y una vez que las matara a las dos iba a llamar al padre y hasta que este llegara las iba a cortar en pedacitos".
Cuando se cansó de pegarles finalmente LDD se durmió y M vio la oportunidad de escapar. Corrió en ropa interior fuera de la casa y huyó. "Cuando él se duerme, la nena empieza a quejarse, la agarré y la envolví en un acolchado y dije 'me escapo o lo mato yo o él me mata a mí'. La puerta de adelante la había cerrado con llaves y las tenía él. La de atrás estaba trabada con palos y había puesto una bici adelante. Saqué todo. Me escapé en bombacha y corpiño, con la nena envuelta en una toalla. Me vio mucha gente", relató sobre aquellos instantes.
Fue una vecina la que la vio herida, le dio refugio y llamó a la policía. Ambas fueron hasta una Unidad de Pronta Atención en Wilde y los médicos ordenaron su traslado en ambulancia al hospital Finochietto de Avellaneda y allí, debido a la gravedad del cuadro, la derivan por último al Hospital Garrahan.
Según indicó TN.com.ar, al ser noticiado de la causa el hombre negó todo y sostuvo que las imputaciones en su contra eran "todo mentira". "Yo no fui, desconozco cómo la nena se lesionó", declaró y eso fue todo lo que dijo el acusado, que tenía antecedentes por los delitos de robo y homicidio en ocasión de robo. El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°4 lo condenó ahora a la pena de 16 años y seis meses de prisión por "tentativa de homicidio".
