La Organización Mundial de la Salud (OMS) reclasificó los tres subtipos conocidos de la variante del virus de COVID-19 detectada en India hace ocho meses y uno de ellos, el B.1.167.2, continúa en la lista de cepas que generan preocupación a nivel internacional por su mayor transmisibilidad. Los expertos sostienen que la concentración mundial debe estar en completar el esquema de vacunación contra el coronavirus ante la aparición de nuevas cepas con grados de peligrosidad en ascenso.
En Reino Unido más de la mitad de las “cepas” del SARS-CoV-2 que circulan en la población corresponden a la variante Delta y los científicos investigan si podría estar asociada con una mayor capacidad de reinfectar, enfermar de manera más grave a la persona y evadir el sistema inmunológico.
El Ministerio de Salud de la Nación informó el mes pasado que ese subtipo fue detectado por primera vez en el país durante el mes de abril en el organismo de un viajero. Por el momento no se registró una circulación comunitaria de la cepa.
Argentina está entre los 31 países que ya notificaron a la OMS la detección local de las cuatro variantes que más preocupan por su impacto clínico y la poca información sobre la eficacia de las vacunas disponibles: Alpha (B.1.1.7 Reino Unido), Beta (B.1.351 Sudáfrica), Gamma (P.1 Manaos, Brasil) y Delta (B.1.617.2 India). Esta última, se identificó en 74 países. "Hasta el momento, no se detectaron las combinaciones de mutaciones características de las variantes Beta, Delta o Kappa", informaron los expertos del Proyecto PAIS, el Consorcio Interinstitucional para la Secuenciación del Genoma y Estudios Genómicos del SARS-CoV-2.
En ese marco, el jefe del Departamento de Medicina del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez e integrante del comité asesor nacional para COVID-19, Eduardo López, expresó que aunque una variante de coronavirus no tenga mutaciones que aumenten su carga viral, "al transmitirse tanto en una comunidad, también hace que tenga efectos más graves porque afecta a un mayor número de individuos, entre las que están los mayores de 60 y las personas con otras enfermedades".

El secretario de Salud británico, Matt Hancock, informó el lunes pasado que se planea monitorear el avance de la pandemia para contener el aumento de los contagios por la variante Delta, caso que podría obligar al gobierno a postergar el levantamiento de las restricciones, previsto para el 21 de este mes. Un informe reciente de las autoridades sanitarias inglesas da cuenta de que esa variante ya se impuso en la circulación viral con respecto de la Alpha.
Una sola dosis de las vacunas disponibles en territorio británico –AstraZeneca y Pfizer– no supera la efectividad del 33% frente a la variante Delta y la aplicación de las dos dosis aumenta la previsión al 60% (AstraZeneca) y el 88% (Pfizer) dentro de las dos semanas posteriores. "Algunos estudios ya empiezan a plantear la posibilidad de una tercera dosis (frente a estas variantes genómicas)", finalizó López al respecto.