En el marco de la pandemia por coronavirus, los expertos mundiales estudian los casos de contagio más grave en personas con antecedentes de tabaquismo, vapeo o exposición al humo.
Un informe sobre el impacto de los irritantes pulmonares en las personas de riesgo o infectadas por coronavirus asegura que, pese a que la relación entre el tabaquismo y el virus aún no es clara, los fumadores y exfumadores pueden experimentar un contagio grave.
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La iniciativa de diputados de la oposición propone subsidios, pensiones y asistencia para familiares y sobrevivientes de la tragedia del fentanilo contaminado.
Panagis Galiatsatos, neumólogo y especialista en cuidados intensivos a cargo de la Clínica de Tratamiento del Tabaco en el Centro Médico Johns Hopkins Bayview, afirma que fumar aumenta el riesgo de enfermedad severa por coronavirus.
"Estamos viendo peores casos de COVID-19 en fumadores -indica-. Sus pulmones interactúan con el medio ambiente con cada respiración. Cuando inhalás el humo del cigarrillo, los gérmenes o los alérgenos, tus pulmones pueden irritarse y esto desencadena reacciones en el sistema inmunológico para combatir esa irritación. Una infección por coronavirus además de eso significa que su respuesta a los síntomas se amplificará", explicó el experto.
El tabaquismo es una epidemia que mata millones de personas por año y está comprobado que es un factor de riesgo cardiovascular y pulmonar que podría exponer a una persona a un riesgo mayor si contrae COVID-19.
El estudio examinó a más de 4.300 jóvenes y descubrió que aquellos que fumaban regularmente, incluidos los cigarrillos electrónicos, tenían de cinco a siete veces más probabilidades de dar positivo en la prueba.
En esta línea, el especialista afirmó que, además, el tabaquismo puede ser un factor transmisor de la enfermedad, ya que las personas tienden a quitarse el tapabocas cuando fuman y hay mayores posibilidades de propagar los aerosoles contagiosos en el aire.
Aunque aún no hay pruebas científicas que certifiquen que fumar propague el coronavirus, es una teoría que pisa fuerte entre los neumonólogos. "El humo de segunda mano puede impulsar virus al aire desde la nariz y la garganta", expresó Galiatsatos.
El vapeo también es un motivo de preocupación mundial, ya que los usuarios exhalan el humo de segunda mano potencialmente infeccioso y muchos de ellos lo hacen en espacios cerrados. "Los cigarrillos electrónicos crean aerosoles, por lo que podrían ser un problema aún mayor que los combustibles en términos de propagación del coronavirus", señaló Galiatsatos. En un ambiente cerrado, las gotas y partículas infecciosas pueden acumularse en el aire y poner en riesgo a otras personas en la habitación si no se asegura la ventilación cruzada.