El Partido Obrero, uno de los sectores integrantes del Frente de Izquierda Unidad realizó este sábado un acto en Plaza de Mayo con más de 35.000 asistentes entre trabajadores, militantes y simpatizantes.
El Partido Obrero, uno de los sectores integrantes del Frente de Izquierda Unidad realizó este sábado un acto en Plaza de Mayo con más de 35.000 asistentes entre trabajadores, militantes y simpatizantes.
La denominada "Plaza de la Izquierda" tuvo como oradores a los principales candidatos de la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires: Romina Del Plá, Gabriel Solano, Néstor Pitrola y Vanina Biasi. También Alejandro Crespo, secretario general del SUTNA; Eduardo Belliboni, dirigente nacional del Polo Obrero; Tatiana Fernández Martí, candidata a legisladora y referente de la juventud y el militante César Arakaki.


La Asociación Bancaria retomó las paritarias y ratificó un nuevo acuerdo en línea con la inflación, acumulando un 24,8% de aumento lo que va del año.
La candidata a diputada nacional Romina del Pla dijo que "la novedad de estas elecciones es el crecimiento de la izquierda en los barrios del conurbano. Crecemos organizando los barrios por todos los reclamos y estamos poniendo en pie una alternativa a la catástrofe social que nos dejan todos los que gobernaron la provincia de Buenos Aires. Este es el resultado de políticas hambreadoras y discursos para la tribuna que no resuelven nada".
Pitrola, en tanto, dijo que "esta es la Plaza antagónica a las del 17 y 18 de octubre, realizadas para apoyar al peronismo del FMI. Desde acá planteamos la tarea estratégica de la recuperación de los sindicatos de mano de la burocracia sindica. En la línea de la formidable victoria del clasismo en el SUTNA. Solo el FIT-U y los trabajadores podemos hacerle frente a la reforma laboral y al FMI".
Vanina Biasi, remarcó que este gobierno desde que asumió "intentó apropiarse de la lucha de las mujeres, luego de la enorme pelea de la ola verde y el fenómeno que se organizó por la conquista del aborto legal seguro y gratuito. Pero rápidamente esta pretensión quedó frustrada. A dos años de gobierno nombran a Juan Manzúr, un hombre ultra clerical, enemigo de los derechos de las mujeres y niñas a cargo del gabinete nacional".