Mientras la pandemia avanza alrededor del mundo, sus consecuencias se siguen manifestando en distintos ámbitos. En nuestro país las clases están suspendidas debido a la medida de aislamiento preventivo, social y obligatorio dispuesta por el Gobierno, y empiezan a surgir algunos inconvenientes.
Uno de ellos es sin dudas la dificultad para pagar las cuotas de las escuelas privadas, debido a la crisis económica que genera este periodo de cuarentena en la población. Es por eso que desde las autoridades gubernamentales, buscan encontrar una solución para las familias que deben afrontar esta situación.
El ministro de Educación de la Nación se juntará con las cámaras que agrupan a los colegios privados de todo el país y se prevé que en el encuentro se analice la forma en la que se abonará el pago de la escolaridad de esas instituciones educativas en el marco de la suspensión de clases que dispuso el Gobierno para contener el avance del coronavirus.
Junto a representantes del área de Educación de todas las provincias, se buscarán las mejores alternativas para otorgar facilidades en el pago de aranceles de las escuelas privadas, garantizando también la continuidad del proceso educativo de los chicos.

"Nuestro desafío es darle continuidad educativa a nuestra escuela, sabiendo que los maestros y maestras son irreemplazables, por eso avanzamos con la implementación de la segunda etapa del programa Seguimos Educando", señaló el ministro Nicolás Trotta.
El programa, según precisó el ministro, "incluye 14 horas de televisión, 7 horas de programas radiales y la distribución de casi 7 millones de cuadernos en todo el país".
Los funcionarios coincidieron en la importancia de "considerar las trayectorias educativas para garantizar los procesos de enseñanza en relación a los núcleos de aprendizaje prioritarios", según informó la cartera educativa.
En ese contexto, se analizó el eventual comienzo de clases en forma escalonada, pero el Ministerio de Educación subrayó que se seguirán las recomendaciones de los epidemiólogos "entendiendo que el regreso a la escuela no es una decisión política o educativa sino sanitaria".

También se fijaron recomendaciones en torno a la dinámica del trabajo virtual, que tomaron en cuenta los recursos disponibles y "la necesidad de la liberación de datos de todos los dominios educativos de la Argentina".