“¿Esto es la justicia? La justicia vendió la vida de Renzo”. Llena de angustia y bronca, Ángela Donato apuntó contra los integrantes del Tribunal Oral y Criminal 3 de La Plata, luego de que le concedieran la prisión domiciliaria a Rosa Martignoni, una de las acusadas por la muerte del nene de 7 años. Si bien la medida había sido confirmada a mediados de julio, la imputada fue excarcelada en plena feria judicial y antes de que pudiesen apelarlo. Así, el equipo que representa a la mamá del nene con síndrome de Down se enteró cuando se acercó a presentar ese recurso. Otro baldazo de agua fría.
El 10 de octubre de 2017, el chico de 7 años cayó desde el séptimo piso del inmueble de 9 entre 55 y 56 en el que vivía su padre. Pese a las maniobras de reanimación, la criatura murió en esa cochera, bajo un cielo lluvioso. Para Ángela no hay dudas de que Diego Villanueva y su pareja concretaron un plan ensayado con antelación y lo arrojó al vacío sin piedad.
En marzo, la jueza Marcela Garmendia había rechazado la solicitud de excarcelación planteada por la defensa de los acusados, que fueron detenidos en marzo de 2018. Pero en julio, los jueces Santiago Paolini, Andrés Vitali y Ernesto Domenech decidieron otorgarle la prisión domiciliaria a Martignoni, que ya se encuentra en el departamento de 6 entre 57 y 58 de su suegra, donde fijó domicilio.
No ocurrió lo mismo con Villanueva. No obstante, como también fijaron la fecha de juicio oral para abril de 2022, podría ser excarcelado cuando se cumplan los dos años bajo arresto, o sea, en marzo del año que viene.
Ni bien le comunicaron la novedad sus abogados, Ángela fue hasta la sede del Fuero Penal de La Plata. Primero buscó a la fiscal Leila Aguilar, para solicitarle que ella también apele la medida. Como no la encontró, fue a pedir explicaciones a los miembros del TOC 3, quienes le cerraron la puerta en la cara. La tensión fue creciendo: le enviaron 20 policías a custodiarla, quienes la amenazaban con llevársela detenida si no abandonaba el edificio de 7 y 56.
“Los jueces se escaparon, lo único que pedí fue que me dieran una explicación, como a una ciudadana, como a una mamá a la que le mataron a su hijo. Ninguno salió a hablar conmigo. Por qué se escaparon si no tienen nada que ocultar”, dijo Ángela en diálogo con 0221.com.ar.
Como no quedó nadie en los tribunales, se dirigió al departamento, ubicado a una cuadra de la sede judicial. Tocó timbre y la misma Rosa Martignoni la atendió por el portero eléctrico. Inmediatamente se disparó un alerta vecinal y aparecieron patrulleros en la cuadra.
Tanto la mamá de Renzo como sus abogados -Romina Reinaldi, Gastón Nicosia y Mariano Carrillo- creen que la excarcelación de Martignoni previa a la apelación fue no solo una “falta de respeto” sino hasta “inconstitucional”. Además, la mujer de 43 años ya no estaría en pareja con Villanueva ni tendría un vínculo “fluido” con su suegra, que la había visitado por última vez en la Unidad 54 de Florencio Varela en febrero de este año.
“Aún así, el Tribunal 3 le dio el arresto domiciliario”, se queja Ángela, que señala que en una de las últimas audiencias Martignoni intentó separarse de Diego y culparlo de la caída del nene. Al mismo tiempo, está convencida de que hay un pacto entre los imputados: “Hay un secreto entre ellos dos, por eso ella no lo manda al frente completamente”.
En medio del dolor y el desconcierto, la mujer prepara una nueva movilización a 22 meses del fallecimiento de su hijo, que podría realizarse el próximo lunes. Pese a la desesperación, asegura: “Voy a hacer lo imposible para que sean condenados”.
