Aunque Medina permanece detenido en el penal de Ezeiza desde septiembre de 2017, en el marco de una causa por intimidación pública, asociación ilícita y lavado de dinero que lleva adelante el juez federal de Quilmes Guillermo Armella, las sorpresas sobre sus manejos en la obra social de los trabajadores de la construcción no dejan de aparecer. La justicia determinó hace un tiempo que Medina tendría un patrimonio no inferior a los US$ 11.386.666, algo así como 527 millones de pesos al cambio actual, entre efectivo en cuentas bancarias, propiedades y vehículos de lujo –entre ellos una Ferrari- a nombre propio o de testaferros. Una colección que revela gustos parecidos a los de Marcelo Balcedo, el otro sindicalista millonario platense preso.
Ahora se supo que, cuando la intervención que comanda Carlos Vergara, se puso a revisar el funcionamiento del camping que el gremio tiene en un enorme predio junto al río de La Plata, en el municipio de Ensenada, no encontró nada. Es decir: la propiedad del predio, donde se construyeron piletas, vestuarios, restaurants, parrillas, una plaza, entre otras instalaciones, no está acreditada.
Cerca del interventor estiman el lugar, cuya ubicación es avenida Almirante Brown al 500, vale entre 40 y 50 millones. Los Medina –Pata y el resto de la familia, con la que ejercía una suerte de nepotismo sindical- usaban el lugar como un búnker propio, donde realizaban encuentros y fiestas. Allí, la intervención encontró, además, motos cero kilómetro y decenas de PC sin utilizar.
Ahora, las autoridades gremiales decidieron que el predio y el dinero con que se construyó lo que hay en él, no tiene un origen que la UOCRA pueda acreditar, por lo que será "devuelto" y quedará en manos del municipio de Ensenada, que gobierna Mario Secco, donde está ubicado. Los albañiles, dicen desde la intervención, eran obligados a pagar una cuota extra para usar ese lugar.
Los vehículos y las PC, serán entregados a una Comuna por orden de Armella: sería la de La Plata. Las autoridades creen que podrían ser parte de una operatoria de empresas "truchas" a nombres de testaferros que funcionaban como contratistas de YPF. Una operatoria similar a la de "Abril Catering", la compañía que llevaba las viandas a las obras y figura a nombre de Juan Horacio Homs, que sería también un testaferro.

ATENTADOS Y RECAUDACIÓN
Las revelaciones sobre el manejo de la UOCRA, una especie de paradigma de la corrupción sindical, llevaron a las autoridades del gremio que comanda Gerardo Martínez a estimar una recaudación "negra" de los Medina que llegaría a los 400 millones de pesos por año. Se componía de lo que le cobraban a los empleados por las "viandas" (que además debían pagar los empresarios), el derecho al uso de camping y parte de los abultados sueldos que cobraban los "veedores" en las obras: delegados de Medina que no hacían ninguna tarea más que percibir esos sueldos.
La investigación de esas irregularidades todavía tiene a la UOCRA platense bajo tensión, con amenazas diarias a los miembros de la intervención, que algunas veces pasan a las manos. Su jefe, Vergara, que vincula con esta tarea el asesinato de un sindicalista allegado suyo llamado Juan Garcilazo el año pasado en Rosario, sufrió un atentado a tiros en su auto, atacado desde una moto en movimiento, que hasta ahora era desconocido.