No faltó nada en este sábado futbolero para el mundo de Estudiantes: volvió a jugar en su tierra y retomó la senda triunfal luego de una racha negativa de siete partidos. En medio de los festejos uno de los históricos del plantel e ídolo del club comenzó a despedirse de la gente. "Pienso que va a ser el final, ya no queda mucho más para sostener", sentenció Rodrigo Braña, ante la consulta en la habitual entrevista televisiva post partido.
Tras analizar cómo fue el trámite del partido ante Patronato, recordó que en junio vence su contrato y casi descartó su renovación para darle paso a su retiro de la práctica profesional del deporte pasión de multitudes: "Cada vez lo alargo un poco más pero llega un momento que no lo puedo sostener", expresó.
La declaración tomó por sorpresa a algunos, pero la mayoría de los integrantes de la galaxia pincharrata intuía el final de la carrera del jugador que fue una de las figuras de la victoria.
El 29 de agosto de 2018, al borde de las lágrimas, Braña jugó su último partido por Copa Libertadores. Esa noche Chapu abrió su corazón: "Uno trata de pensar en lo grupal, yo no puedo pedir mucho. Hacemos malabares ya para jugar. Ya estoy cansado. Cuando te ponés más grande, te ponés más sensible, no tenés revancha y sabés que esta competencia que tanto la disfruté ya no la voy a tener. Pero si había una forma de despedirme de esta competencia, era así, como lo hicimos en esta serie, luchando ante el último campeón y al que estuvimos tan cerca de eliminar". Visiblemente emocionado Rodrigo Braña dejó abierta la posibilidad de su retiro y, al borde del llanto, se despidió de la Copa que tantas alegrías le dio. La alzó y besó en 2009, año en que el club obtuvo su cuarto título continental de la especie.
Al Pincha llegó en la temporada 2004/2005, jugó más de 300 partidos en sus dos etapas y dio tres vueltas olímpicas. Participó en 65 partidos internacionales (48 de Libertadores en siete ediciones), marcó un gol histórico ante Juan Aurich en Perú en el 2010, formó parte de las mejores duplas centrales del fútbol argentino junto a Juan Sebastián Verón y se metió en la historia grande del Pincha.