Este lunes 9 de julio, además de celebrarse el Día de la Independencia, es una fecha que quedará en la memoria de los platenses durante mucho tiempo. Un día como hoy, pero del 2007, la ciudad se teñía de blanco ante la llegada de la nieve. Con una temperatura mínima de 0,8° y una máxima de 5°, el clima fue ideal para el espectáculo que cautivó a grandes y chicos durante toda esa mágica jornada.
Según los registros del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se combinaron tres factores fundamentales para que nevara en La Plata: un sistema de inestabilidad en los niveles medios de la atmósfera, a 5.000 metros de altura, un enfriamiento de la misma en sus capas bajas, a 1.500 metros y, por último, el viento del sudeste que trajo humedad. Este cóctel produjo que las precipitaciones fueran en forma de nieve.
El interventor del SMN de aquel entonces, Héctor Ciappesoni, había titubeado a la hora de informar del suceso debido a la rareza y las bajas chances de que sucediera. “Es un fenómeno que se da cada 100 años y es muy difícil de anunciar”, había explicado. Sin embargo, ocurrió. Y esa no fue la primera vez, ya que la ciudad se había teñido de blanco el 22 de junio de 1918, aunque con condiciones un poco más extremas ya que se habla de 80 centímetros de nieve acumulada en el Bosque.

¿Habrá chances de que la nieve vuelva a visitar a La Plata? Por el momento, esta no es una posibilidad cercana debido a los cambios climáticos ocurridos en los últimos 40 años. Los inviernos platenses son cada vez más cálidos y húmedos y la temperatura media aumentó tres décimas de grado, ubicándose en los 12. Las condiciones ideales para que nieve otra vez difícilmente vuelvan a repetirse en mucho tiempo.