La Municipalidad de La Plata avanzó este lunes con la idea de eliminar el adoquinado en más de 50 cuadras del casco urbano que lo conservan y están resguardadas como patrimonio por una ordenanza previa. Lo hizo a través de un nuevo proyecto que plantea la excepción de esas arterias por causas vinculadas con la seguridad vial y el tránsito. El mismo fue despachado en una reunión conjunta de comisiones y en caso de que haya acuerdo político será votado en la próxima sesión.
La excepción afecta a siete arterias claves (que suman más de 50 cuadras) como las diagonales 73 y 77, algunos tramos de las avenida 7 y 13 y las calles 12 y 15 y cinco plazas como Rocha, Alsina, Matheu, Máximo Paz y España. El alcance de la medida según expresaron los voceros del oficialismo en la reunión, es la de habilitar al intendente a avanzar con esa acción en el marco de un "plan integral" para el tránsito en la ciudad, que incluye la posibilidad de implementar vías rápidas, cambios en las reglas de estacionamiento o implementación de bicisendas.
Su aprobación no implica, según se dijo en la reunión, que inmediatamente se avanzará con la intervención de esas calles. Pero sí será un modo de liberar las manos del intendente Julio Garro en caso de que los distintos proyectos avancen en función del financiamiento que se consiga.
Hay, de todos modos, algunas calles que son prioritarias, como los dos tramos de Diagonal 73 (especialmente entre las plazas Azcuénaga y Moreno, y Rocha y Matheu) o calle 12 entre 64 y 68, en uno de los laterales del Parque Saavedra.
El tipo de intervención que se realizará será determinado por el propio Departamento ejecutivo y dependerá en buena medida de las características de cada calle o si requiere la realización de obras hidráulicas. Las opciones son dos: una cobertura de asfalto sobre los adoquines o las extracción éstos para su conservación o posterior utilización en otras calles que lo conserven. Según se indicóm desde el punto de vista presupuestario la primera opción es la más económica.
La ordenanza vigente que protege el adoquinado de la ciudad es la 9008, de autoría del presidente del bloque Cambiemos, Claudio Frangul. El artículo 3º de la misma declara “Patrimonio Arquitectónico y Cultural” al empedrado de granito. Y establece que las calles, avenidas y paseos que cuentan con ese material “deberán ser conservadas en su estado originario en que se encuentran y debidamente preservadas, no pudiendo ser cambiadas por otros componentes (asfalto, hormigón, etc.)”.
Inicialmente, el Ejecutivo había mandado un proyecto que la modificaba, flexibilizando su carácter prohibitivo absoluto y permitiendo las modificaciones en aquellos lugares donde se considere oportuno hacerlo, pero sin dar precisiones de cuáles serían esas calles. Algunos planteos, surgidos tanto del oficialismo como de la oposición, llevaron a proponer un cambio que fue aceptado por el equipo de gobierno, que optó por avanzar con excepciones sin modificar la norma general.
"Exceptuase de los alcances de las ordenanza 9008 a las siguientes arterias", dice el texto. Y lo fundamenta en razones de "seguridad vial, el normal funcionamiento del transporte público, la accesibilidad a establecimientos educativos, centros de salud y por cuestiones de movilidad urbana general".
La lista de calle que tienen adoquines y podrán ser quitados o tapados son:
-Diagonal 73 entre Plaza Azuénaga y Plaza Moreno.
-Diagonal 73 entre Plaza Rocha y Plaza Matheu.
-Calle 12 de 64 a 68.
-Avenida 66 de 1 a 12.
-Calle 15 de 60 a 61.
-El contorno de Plaza Alsina.
-El contorno de Plaza Matheu.
-El contorno de Plaza España.
-El contorno de Plaza Máximo Paz.
-El contorno de Plaza Rocha.
-Diagonal 77 de 1 a 12.
-Avenida 13 de 54 a 60.
-Avenida 7 de 66 a 72.
EL DEBATE
En la Comisión en la que el oficialismo avanzó con el despacho con el objetivo de votarlo rápidamente, los defensores de la idea fueron el presidente de la Comisión, Javier Mor Roig, y el presidente del Concejo Deliberante, Fernando Ponce, quien fue terminante a la hora de reclamar que el despacho salga para que el Departamento Ejecutivo defina el modo en que se avanzará tanto en la proyección como en la búsqueda de financiamiento.
La oposición reclamó por un proyecto propio, que había presentado Norberto "Chucho" Gómez, en el que se plantea que para cada calle en la que se avance se requiera de un dictamen del Consejo Único de Ordenamiento Territorial (CUOT) respecto de sus factibilidades técnicas. En algunos casos se plantearon objeciones de tipo patrimonial, como en el caso de Diagonal 77 a la altura del Liceo Víctor Mercante incluida entre las excepciones. El oficialismo remarcó que hay zonas que seguirán protegidas como el barrio Meridiano V y Tolosa.
También indicaron que la vía elegida para avanzar con el tema es similar a la usada en el último antecedente en que se retiraron adoquines. Por una excepción de avanzó por ordenanza en la calle 40 de 8 a 11 y en la 60 de 1 a 3, aunque en éste último caso solo se ejecutó en una cuadra. En ese marco Mor Roig aportó una cifra: de 1.600 cuadras que tiene el casco urbano, hay 245 con adoquines de las cuales ahora, unas 50 serán las que podrían pasar a tener pavimento.