La UNLP de pondrá en funcionamiento la primera planta piloto productora de prebióticos. Se trata de componentes alimentarios no digeribles que pueden formar parte de la matriz de ciertos alimentos o ser adicionados como ingredientes para mejorar la calidad y alcanzar un producto más saludable.
Este inédito desarrollo del Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología de Alimentos (CIDCA) está enfocado en la síntesis de fructo-oligosacáridos (FOS) y galacto-oligosacáridos (GOS) de cadena corta, a partir de materias primas como la sacarosa y la lactosa, respectivamente. Ambos componente son fibras saludables para el organismo.
La directora del proyecto, Andrea Gómez-Zavaglia, explicó que el proyecto está "orientado al mercado de prebióticos para ser adicionados en diferentes matrices alimentarias y apunta a satisfacer la necesidad y disponibilidad de una alimentación que genere beneficios a la salud, a un precio accesible para todas las personas".
La gran ventaja de la iniciativa radica en la fabricación de componentes alimentarios a nivel local, lo que permitirá reducir los costos de uso. Hasta el momento, estos productos no se fabrican en el país y deben ser importados. En concreto, la flamante planta apunta a producir FOS y GOS en presentaciones de jarabe o polvo, de acuerdo a la necesidad de cada uno de los clientes. Para crearlos, los investigadores usarán materias primas de origen nacional como lactosa y sacarosa.

El monitoreo y control de calidad se realizará en tiempo real y los investigadores de la UNLP contarán con el mejor equipamiento, sumado a la implementación de técnica de análisis amigables con el medio ambiente. El proyecto del CIDCA está ahora en etapa de escalado piloto y se llevará adelante en la denominada Planta Piloto Multipropósito (UNLP-CIC), que funciona en Camino Centenario y 506.